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El SNP da forma a su proyecto para una Escocia independiente

La conferencia anual de otoño del SNP ha dibujado el proyecto que la formación tiene para una Escocia independiente: compañía nacional de energía, semana laboral de cuatro días, nuevos sistemas de fiscalidad y pensiones, municipalismo y sin armas nucleares.

Nicola Sturgeon ha participado en la conferencia desde su despacho. (Jane BARLOW/AFP)

El SNP celebró, desde el pasado viernes hasta ayer lunes, su conferencia anual de otoño y la cita ha servido para que la militancia del partido haya ofrecido su respaldo al proyecto que la dirección del partido tiene para Escocia. Se discutió sobre cambio climático, Brexit, empleo, armas nucleares, educación, transportes, pensiones o salud. Todo ello condicionado por un elemento indispensable: la independencia.

Nicola Sturgeon anunció la semana pasada que el Ejecutivo escocés ya trabajaba en la organización de un nuevo referéndum y que había comenzado a elaborar un prospecto «detallado» sobre la votación y la independencia. Los temas no se alejaran en exceso de lo tratado a lo largo del fin de semana en la conferencia del SNP, que se llevó a cabo online debido a la pandemia.

Potenciar el municipalismo ahora distorsionado en unos consejos comunitarios disfuncionales, un sistema fiscal progresivo donde quienes más tengan paguen más, la semana laboral de cuatro días reduciendo horas pero aumentando productividad, algo que ya se está probando con un programa piloto en varias empresas del país, un sistema educativo que Londres ha llevado a los tribunales, incluso un nuevo sistema nacional de transportes que llegue a las zonas rurales, «especialmente lejos», en todos sus sentidos, de Londres, un sistema de pensiones con Noruega o Dinamarca como ejemplos y un Servicio Nacional de Salud propio se destacaron como prioridades para los miembros del SNP.

Muchas de estas medidas ahora se ven hipotecadas por las políticas de austeridad de Londres, que, de hecho, ya ha anunciado nuevos recortes, para fechas próximas. «El Gobierno escocés no puede existir únicamente para mitigar las políticas crueles implementadas en otros lugares. Debemos ser capaces de forjar nuestro propio camino», señaló la secretaria de Justicia Social del Ejecutivo, Shona Robison. En esa línea, el SNP apuesta por una Escocia independiente con una Renta Básica Universal «para asegurar que nadie caiga por debajo de un nivel de vida aceptable». En definitiva, levantar el techo constitucional con el que se encuentran en el marco del Reino Unido.

COP26, para dibujar Escocia y el planeta

El cambio climático se estableció como uno de los temas centrales de la conferencia y es que Glasgow acogerá en noviembre la COP26 de la ONU. «No es solo la cumbre mundial más importante desde que se firmó el acuerdo de París, sino que probablemente sea el evento internacional más importante en una generación, con la seguridad futura del planeta y, en particular, de los pueblos más pobres del mundo, esperando los resultados de esas negociaciones», señala la resolución aceptada por el partido.

La conferencia reconoce que, si bien los costos de llevar a cabo la transición de emisiones a cero neto al ritmo y escala requeridos ascenderán a muchos miles de millones de libras, «esa inversión también puede generar múltiples beneficios», incluidos nuevos empleos e ingresos fiscales. Sin embargo, Escocia, en estos momentos, no tiene plenos poderes sobre impuestos y otras palancas fiscales y económicas que puedan reconducir esto.

Por ello, aceptaron que se establezcan, en una Escocia independiente, beneficios fiscales inmediatos para inversiones ecológicas y han pedido a Londres que haga lo propio.

Los militantes de la formación escocesa también apostaron por una energía «cercana al 100%» eólica, terrestre y marina, además mareomotriz, hidroeléctrica y solar fotovoltaica. «La política energética del Reino Unido ha frenado nuestros objetivos escoceses locales y nacionales». Para poner en marcha todo ello, la conferencia puso el foco en una compañía nacional de energía de Escocia para establecer el estándar para la producción de energía limpia y un sistema nacional de carga justo para la producción y el consumo de fuentes de energía renovables. «Aún podemos avanzar bajo los limitados poderes de transferencia con innovación y determinación, pero Escocia necesita los plenos poderes de la independencia para realizar los cambios transformadores necesarios».

Sin armas nucleares

La conferencia también hizo su escala en uno de los temas que más consenso genera al norte de la isla. Los escoceses quieren las armas nucleares fuera del río Clyde. Y han fijado tres años después de la independencia como fecha tope. Además, rechazaron que se convierta en «Guantánamo en el Clyde», retenido como territorio del Reino Unido en un estado soberano escocés, y tampoco aceptaron la posibilidad de un «modelo de Gibraltar» que permitiría la «posesión colonial de facto» del sitio. La propuesta del SNP para el lugar, todavía sin concretar, que se convierta en la sede del Ejército escocés.

Con todo ello, el SNP desea dejar de mirar hacia el sur (Londres), para fijar su vista en los modelos de estados independientes como Finlandia, Noruega o Dinamarca.

La fecha

Sin embargo, para ello necesitan un nuevo referéndum. Y ganarlo. El viceprimer ministro, John Swinney, fue conciso a la hora de definir la forma de entender la independencia por parte de su formación. «Sería lo normal que nuestros hijos, nietos y futuras generaciones vivieran y formen una nación con un gobierno con los poderes normales que tienen otros gobiernos».

A pesar de ello, la pregunta que todavía no ha obtenido una respuesta concreta es la de la fecha. Sturgeon insistió en su deseo de realizarlo antes de que termine 2023, pero por el momento la consulta no tiene sitio establecido en el calendario. Al respecto, Swinney apuntó que «la salud, el bienestar y el potencial económico de las personas en Escocia no deben comprometer su salud, bienestar y potencial económico futuro mediante la celebración de un referéndum sobre la independencia antes de que sea seguro hacerlo».

Sin embargo, añadió que debe realizarse «a tiempo para decidir que queremos dotar a nuestro Parlamento de los poderes que necesita para impulsar nuestra recuperación a largo plazo de Covid». Es decir, la campaña del referéndum y la recuperación deben ir de la mano. «Los poderes transferidos a Holyrood no van lo suficientemente lejos y la independencia es, por lo tanto, esencial para nuestra recuperación».

Sturgeon cerró la conferencia reiterando su apuesta por el acuerdo con el Gobierno británico para celebrar un referéndum. «Pero si no hay cooperación, la democracia debe prevalecer», sentenció.