El Parlamento polaco da luz verde al muro antimigrantes en la frontera con Bielorrusia
El Parlamento polaco ha aprobado la construcción de un muro de 100 kilómetros en su frontera con Bielorrusia con la intención de detener la llegada de migrantes desde ese país.
El Parlamento polaco ha dado luz verde a la construcción de un muro en su frontera con Bielorrusia con la intención de detener la llegada de migrantes desde ese país, de lo que Varsovia responsabiliza al Gobierno del presidente Aleksander Lukashenko.
La ley fue impulsada por partido ultraconservador Ley y Justicia (PiS) y se espera que el presidente del país, Andrzej Duda, la ratifique en los próximos días con su firma.
El coste de la construcción del muro está estimado en unos 350 millones de euros y deberá cubrir una franja de unos 100 kilómetros.
El Gobierno del primer ministro Mateusz Morawiecki ha justificado el proyecto en la necesidad de proteger las fronteras exteriores de la Unión Europea (UE) ante lo que califica de una «guerra híbrida» lanzada por Lukashenko para desestabilizar el territorio comunitario con la llegada de inmigración.
El ministro de Defensa, Mariusz Blaszczak, anunció el pasado lunes el envío de casi 3.000 soldados más a la frontera y con este refuerzo, «pronto habrá 10.000 efectivos vigilando la frontera» polaco-bielorrusa, afirmó. Los soldados permanecerán en el lugar mientras continúa la construcción del muro, de tres metros de alto, y se activarán los sistemas de vigilancia electrónica.
Según datos de la agencia europea de vigilancia fronteriza Frontex, entre enero y setiembre de este año, casi 1.400 personas migrantes han cruzado la frontera polaca desde Bielorrusia.
Varsovia mantiene el estado de emergencia desde hace casi dos meses en las tres provincias limítrofes con ese país. En los últimos meses han muerto ocho personas en la frontera polaco-bielorrusa por congelación, intoxicaciones o enfermedades.