El rey de Marruecos afirma que la ocupación del Sahara Occidental «no es negociable»
En el aniversario de la Marcha Verde y en plena crisis con Argelia, el rey marroquí, Mohamed VI, ha defendido que la ocupación del Sahara Occidental «no es negociable» y ha advertido a la UE de que Rabat no firmará acuerdos comerciales que no incluyan el territorio ocupado.
El rey de Marruecos, Mohamed VI, ha defendido este sábdo la ocupación del Sahara Occidental en un discurso con motivo del 46 aniversario de la Marcha Verde, en el que ha subrayado que «hoy como en el pasado, la ‘marroquinidad’ del Sahara no estará nunca en el orden del día de ninguna negociación».
Además ha asegurado que su país no firmará con ningún país o bloque regional acuerdos económicos o comerciales que excluyan al territorio del Sahara Occidental.
«Marruecos no dará con ellos ningún paso económico o comercial que excluya al Sahara», ha insistido el monarca sobre los países o bloques que mantienen lo que ha considerado «posturas difusas o ambivalentes» sobre ese territorio.
La Marcha Verde fue una iniciativa del difunto rey Hasán II en la que envió a miles de personas para anexionarse y colonizar el Sahara Occidental tras la salida del Estado español, que lo administraba como colonia, ignorando las demandas de la población saharaui.
Aunque no ha citado expresamente a la Unión Europea ni a ninguno de sus socios en concreto, su mensaje llega después de que el pasado 29 de setiembre el Tribunal General de la Unión Europea (TGUE) anulara los acuerdos de asociación y de pesca entre la UE y Marruecos al dar la razón al Frente Polisario, que los había impugnado por explotar recursos del Sahara.
El Tribunal reconocía además así al Frente Polisario como representante del pueblo saharaui.
El monarca responde ahora presionando a la UE, que ya señaló que estaba dispuesta a eludir la sentencia, para que siga avalando la ocupación y la explotación de los recursos por parte de Marruecos.
Silencio sobre Argelia
El discurso de Mohamed VI se produce además en plena crisis con Argelia, que ha cortado relaciones diplomáticas y el gasoducto que atraviesa Marruecos para suministrar gas a Europa, aunque ha eludido referirse a esta crisis.
Hasta ahora. Marruecos se mantiene en su estrategia de silencio en la gestión de su tensión con Argelia así como de ignorar el conflicto bélico con el Polisario y no ha reaccionado de forma oficial a la última acusación de su vecino del este.
Argelia denunció el pasado miércoles que tres de sus ciudadanos murieron dos días antes en un bombardeo del Ejército marroquí contra un convoy de camiones en la ruta que une la ciudad argelina de Uargla y la capital de Mauritania, Nuakchot.
Negociaciones, solo por la autonomía
«Si entablamos negociaciones, es principalmente para lograr una solución pacífica de este conflicto regional artificial. Sobre esta base, reafirmamos el compromiso de Marruecos con el proceso político liderado por la ONU», ha indicado.
Además, Mohamed VI ha calificado como «acción pacífica« la intervención de efectivos militares marroquíes contra activistas saharauis para expulsarlos del paso de Guerguerat y de la carretera que une Marruecos y Mauritania el 13 de noviembre de 2020. Esta acción fue considerada por el Frente Polisario como una violación del alto el fuego de 1991 y por ello lo dio por terminado.
El monarca marroquí también ha asegurado que la nueva Administración estadounidense ha mantenido el reconocimiento de la soberanía marroquí sobre el Sahara Occidental que decidió el ahora expresidente Donald Trump.
«Confirma el carácter irreversible del proceso político en curso: poner en marcha una solución final basada en la Iniciativa de Autonomía, bajo soberanía marroquí», ha insistido, obviando el mandato de la ONU para llevar a cabo un referéndum de autodeterminación.
Para Mohamed VI, «el carácter marroquí del Sahara es una verdad tan perdurable como inmutable».