El lehendakari pierde prisa con el nuevo estatus tras el freno de Andoni Ortuzar
Urkullu ha dejado atrás este viernes en el Parlamento las prisas que el 16 de febrero mostró sobre la necesidad de que «este es el momento» de afrontar el debate del Nuevo Estatus por el futuro incierto de la política en el Estado. Una semana después el presidente del EBB echó el freno.
La portavoz de EH Bildu en el Parlamento de Gasteiz, Maddalen Iriarte, ha vuelto a mostrar este viernes al lehendakari Iñigo Urkullu la disposición de su grupo a retomar «hoy mismo» los trabajos para pasar a la concreción del Nuevo Estatus «en base al único acuerdo existente». Una fase de concreción ante la que ha apuntado que, cuando llega, parece que el lehendakari y el PNV «se paralizan o les paralizan, o no se atreven o no les conviene o no quieren».
En su respuesta, el lehendakari ha expuesto posiciones que ya había planteado con anterioridad, pero no ha mostrado las urgencias que mostró públicamente el 16 de febrero. En esa fecha Iñigo Urkullu, declaró en Euskadi Irratia que este «es momento de afrontar» el debate del Nuevo Estatus en la Cámara de Gasteiz para «dar otra capacidad al autogobierno» de la CAV y llevarlo a Madrid, «porque no sé qué situación se puede dar en el futuro en el Congreso», cerró con cierto temor.
No era la primera vez que se expresaba en ese sentido. El 25 de junio pasado, en otra intervención en el Pleno –esa vez en respuesta al presidente del PP, Carlos Iturgaiz–, valoró positivamente reavivar el debate sobre la actualización del autogobierno «aquí y ahora».
En aquel momento, el PNV hablaba de que el debate se pudiera reactivar en otoño de 2021. Sin embargo, ahora, apenas una semana después de las declaraciones del lehendakari en Euskadi Irratia, el presidente del EBB, Andoni Ortuzar, vaticinó en una conferencia que será a finales de 2023 o principios de 2024 cuando se abra «una ventana de oportunidad que no deberíamos desaprovechar y va a ser la que vaya desde el tramo final o inicio de la nueva legislatura española y el final de la legislatura vasca».
Después de esto, el lehendakari, en su intervención de hoy ha afirmado que «somos representantes institucionales de la sociedad vasca y tenemos la oportunidad de acordar una propuesta que sea sometida a referéndum. La última palabra, la decisión, corresponde a la sociedad vasca. La primera responsabilidad se encuentra en este Parlamento. Tras todo el trabajo realizado, y sobre la base de los consensos alcanzados, nos corresponde dar el primer paso y plantear una propuesta que sea sometida a ratificación de la sociedad». Pero ya no ha expuesto las prisas de hace apenas un par de semanas.
El derecho a decidir como proceso
Maddalen Iriarte le ha preguntado «¿cuál es, de cara a acordar el nuevo estatus político, el elemento que puede unir a la mayoría social y política?». E Iñigo Urkullu le ha respondido que no hay un elemento único sino que son muchos.
La portavoz de EH Bildu ha recordado que la base esencial es el derecho a decidir y le ha recordado al lehendakari que ha hablado dos veces en el Parlamento de la «consulta habilitante», que es aquella que sometería al refrendo de la ciudadanía el texto del Nuevo Estatus que salga del Parlamento antes –y ese antes es el elemento esencial– de que sea llevado a debate en las Cortes españolas.
Sobre esta materia, el lehendakari ha apuntado que el derecho a decidir no está jurídicamente regulado, y ha asegurado que se da más como un proceso. Ha añadido que el derecho a decidir debe ser un punto de unión y no de confrontación de la ciudadanía. Ha hecho referencia a que el acuerdo que se de en las instituciones deberá ser «sometida a referéndum», pero sin aclarar si hablaba de la «consulta habilitante» o del referéndum que todo proceso de reforma estatutaria contempla según la Constitución española.