Igor Arrieta volvió a posar con Alejandro Valverde diez años después en un podio
El navarro del Kern Pharma se sacó una foto con nueve años junto a sus compañeros de la escuela en su primera campaña en el ciclismo en el inicio de la Vuelta en Iruñea de 2012 con el murciano, que entonces dirigía su padre José Luis. En O Gran Camiño coincidieron con el mallot blanco y el amarillo.
Igor Arrieta (Uharte Arakil, 2002) terminó la pasada semana en el podio final con el maillot blanco como mejor joven su primera vuelta como profesional en O Gran Camiño, ganada por Alejandro Valverde, donde fue cuarto a sus 19 años en la etapa reina y séptimo en la general superado solo por seis corredores del World Tour.
El murciano completó su primer año como profesional antes de que el navarro naciera en diciembre de 2002 y lo ha visto cerca desde su niñez. Así guarda con cariño una fotografía en el inicio de la Vuelta en Iruñea de 2012, en la primera temporada en la escuela de ciclismo de Igor Arrieta con nueve años y la undécima como profesional de Alejandro Valverde con 32.
Además han coincidido cuando iba a estar con su padre José Luis, profesional desde 1993 hasta 2010 y director en Movistar del murciano desde 2011 hasta 2021, en carreras o días de descanso de Tour y Vuelta: «A Alejandro o los Izagirre los veía cuando iba al hotel y desayunaba o cenaba con ellos. Coincidir ahora en el pelotón es bonito».
En su debut profesional ha corrido con Valverde en Mallorca y en Galicia: «Tampoco suelo hablar mucho con él, pero en el podio me dijo que había andado muy bien y a ver qué tal iba. Verle que desde antes de nacer yo esté ahí igual choca un poco, pero demuestra los años que lleva y lo bueno que ha sido. Y verle ganar en mi primera vuelta y que en todas las etapas no ha bajado del podio es bonito».
Bien desde el primer día
El navarro llegaba con confianza a la vuelta gallega, su primera como profesional: «No sabes cómo vas a estar el primer año y en Mallorca empecé a ver que andaba bien y podía estar con los mejores. Luego en Jaén al verme adelante te da moral de ir a las carreras sintiendo que puedes estar con esa gente».
Ha demostrado su capacidad para adaptarse rápido a cada categoría como hizo el año pasado en su primer año sub’23. Siempre ha competido con corredores mayores: «Siendo de diciembre eres un año más joven que el resto y se nota, pero me he ido adaptando bien siempre. Das el paso a profesionales, a lo máximo y siempre es más difícil. He andado muy bien, pero veo que me falta mucho».
En O Gran Camiño confirmó que puede dar su mejor nivel en las pruebas por etapas: «Siempre me han gustado los carreras de montaña y me gustaría ser un corredor de vueltas. En Galicia vi que podía estar adelante en las etapas de montaña. El año pasado corrí y gané la Vuelta a Castellón y en el Tour del Porvenir acabé bastante contento con mi rendimiento. En la última etapa fui décimo. De momento veo que con el paso de los días en las vueltas no sé si voy a mejor o al menos mantengo el nivel como el primer día».
Del desarrollo de la carrera destaca que «en profesionales era la primera vuelta. Iba a ver qué tal andaba y no sabía cómo la haría. En la segunda etapa subí con la rueda partida y no me di cuenta hasta que empecé a bajar. No sé si me perjudicó, pero con el calentón no lo noté mucho. Hice buena subida. Tras el esfuerzo de esa etapa y la dureza no sabes cómo va a recuperar tu cuerpo y en la tercera fue la sorpresa porque me vi con muy buenas sensaciones y encima, al estar con toda esa gente, te sube la adrenalina y te motivas de decir que estoy aquí».
También respondió bien en la contrarreloj final: «Con la cabra empecé el año pasado con esas medidas, estaba bastante acostumbrado a la bici y acabé satisfecho con la crono que hice. Mejor siempre se puede hacer, pero me quedé muy contento».
Indurain e Itzulia
Ya antes de comenzar la temporada su director Juanjo Oroz pensaba llevarlo a la Itzulia y sus primeros días de competición han confirmado su debut en casa en el World Tour. La próxima semana irá a Sierra Nevada para concentrarse en altura con los ciclistas de Kern Pharma que disputarán la Volta y la Itzulia y volverá a competir en dos pruebas especiales para él como el Miguel Indurain en Lizarra y la prueba vasca.
«La Itzulia es una carrera World Tour, el nivel es más alto, e iremos allí a ver qué tal se da. Está siendo un año de sorpresas. Hace un año debutaba como sub’23 y estaba en el Valenciaga y la semana siguiente ibas a ver la Itzulia. Ahora poder correrla es algo para sentirse orgulloso. Antes iba al G.P. Miguel Indurain o a la Itzulia a ver al aita o en el coche a seguir la etapa y este año poder correrla será especial», destaca Igor Arrieta.
Todo le va rodado, pero no deja de tener los pies en el suelo: «Desde fuera siempre se ven los resultados y parece todo fácil, pero hay que tener la cabeza asentada y seguir por este camino, que es el bueno. De momento solo pienso en la Itzulia. No hemos hablado de lo que correré más adelante, no sabemos aún el resto del calendario».
Si no se ha decidido antes intentarán ganarse la invitación para la Vuelta: «En Mallorca estuvimos ahí, en Andalucía y Valencia parecía que faltaba un poco, pero en Galicia se vio que el nivel del equipo va poco a poco para arriba. Ojalá nos invite la Vuelta al equipo. No sé si yo o quién, pero que podamos estar. Me parece como demasiado con 19 años ir a la Vuelta. No sé si será mejor o peor, pero no lo tengo muy claro, aunque todavía no hemos hablado de lo que haré esta temporada».