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Plural movilización en Bilbo por el derecho a la energía y contra el «saqueo»

«Derecho a la energía» ha sido la demanda básica que han trasladado en las calles de Bilbo organizaciones políticas, sociales y sindicales muy diferentes, unidas en un contexto de subida del precio de la luz pero también de otras materias primas, alimentos o vivienda.

La cabecera de la movilización, por las calles de Bilbo. (Aritz Loiola | Foku)

Organizaciones sociales, ecologistas y sindicales han denunciado este sábado en Bilbo la subida del precio de la luz y la energía, al tiempo que han criticado los beneficios que obtiene «el oligopolio eléctrico».

Ekologistak Martxan, Sukar Horia, Azet, Alogerekoak, Auzo Elkarteen Federakundea, ELA, LAB, CCOO, Steilas, Komite Internazionalistak, Gu Ere Bagara Bilbo, Ernai, Sortu y Greenpeace han organizado así una marcha que ha arrancado a las 18.00 horas desde la Plaza del Arriaga, caracterizada por su transversalidad, como puede verse, y que ha tenido parada ante la torre de Iberdrola.

Tras una gran pancarta en la que se podía leer 'Sakeoari ez! Derecho a la energía!', cientos de personas han reclamado medidas para el abaratamiento de la factura de la luz.

Las organizaciones convocantes han denunciado también que, aunque hay factores coyunturales que «alientan» la actual subida de la luz, de modo que el «problema de fondo» es un diseño del sistema eléctrico hecho «a medida de las grandes compañías eléctricas».

Asimismo, han recordado que, junto a la subida de la luz, se está concatenando el encarecimiento de otros productos básicos, como el petróleo y el gas, así como la vivienda.

De este modo, han alertado de «la pobreza energética» que padecen miles de personas y el «empobrecimiento y la precarización de las clases más bajas».

Pese a la dureza del momento actual para muchas familias y personas, en la convocatoria no ha faltado el humor, con personas disfrazadas del presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, y presumiendo de sus inmejorables relaciones con el lehendakari de la CAV, Iñigo Urkullu. Tampoco ha escaseado la imaginación, en pancartas como la que decía que «El problema no es el precio de la energía, sino que la energía tenga precio».

Sectores especialmente afectados

Según los impulsores de la iniciativa, la subida de los precios ha hecho que se «multipliquen los desequilibrios existentes», lo que afecta de forma más grave a «sectores de la población como los jóvenes, las mujeres, las personas con diversidad funcional, las personas migradas y especialmente a las personas en situación irregular».

En esta línea han apuntado que es necesario situar estas subidas de la luz en el marco de un sistema capitalista que «se alimenta y enriquece a partir del empobrecimiento y la precarización de las clases más bajas», siendo esta brecha cada vez mayor, pasando por encima de los límites del planeta y de las necesidades de las personas.

Censuran además que los intereses políticos y económicos presenten la situación del precio de la electricidad como «un fenómeno meteorológico, algo que se produce fuera de la voluntad humana, mientras que la realidad queda muy lejos».