El Supremo admite a trámite el recurso contra el proyecto del Obispado de Bilbo
El Tribunal Supremo ha admitido a trámite el recurso presentado por Ekologistak Martxan contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) que amparaba la legalidad del proyecto urbanístico del Obispado de Bilbo en el solar de la antigua Escuela de Magisterio (BAM).
El Tribunal Supremo ha aceptado el recurso de casación interpuesto por Ekologistak Martxan contra el Estudio de Detalle de la parcela del Obispado de Bilbo que ocupa la antigua sede de la Escuela de Magisterio BAM, en el barrio bilbaino de Abando.
La petición de casación ahora aceptada por la Sala Quinta del Supremo fue interpuesta el pasado 18 de mayo y recurre la sentencia del TSJPV de diciembre de 2020 que desestimaba el recurso contencioso administrativo de Ekologistak Martxan.
En aquel recurso, recuerda la organización ecologista, se ponían de manifiesto los «vicios» que a su juicio contenía el estudio de detalle del proyecto urbanístico: ausencia del preceptivo estudio de impacto medioambiental y la omisión del informe de servidumbres aeronáuticas.
Los recurrentes consideran que «un fallo del Supremo anulando el estudio de detalle para la parcela, convertiría el proyecto y las obras en ilegales».
«El PGOU de Bilbao recientemente aprobado no legaliza la ordenación del Estudio de Detalle, porque, en lugar de dotar al ámbito de ordenación propia, se limita a decir que la ordenación de ese ámbito es la que resulta del Estudio de Detalle», añade Ekologistak Martxan.
En el controvertido solar, el Obispado de Bilbo, propietario del suelo, pretende centralizar los servicios de la diócesis y vender la mitad de la edificabilidad, conseguida mediante la recalificación, a Mutualia, para abrir una clínica privada.
Las obras llevan paradas 7 meses, desde que se terminó de derribar el antiguo edificio de la Escuela de Magisterio del Obispado de Bilbo (BAM).
Por último, ha afirmado que el vecindario, a través de la asociación Abando Habitable, ha organizado un concurso de ideas para proponer que se construya un parque en lugar del edificio planeado, y se aproveche así como zona verde «el último espacio libre sin construir del barrio».