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La «guerra del petróleo» llega al mar y enfrenta a Irán y Grecia

Teherán ha respondido a la incautación de un petrolero ruso y a la decisión de Atenas de transferir a EEUU el crudo iraní que portaba capturando dos tanqueros griegos. La guerra del gas y petróleo, uno de los frentes de la invasión rusa de Ucrania, se extiende al mar Mediterráneo y al Golfo Pérsico.

Un carguero liberiano se incauta del crudo iraní a bordo del petrolero ruso incautado por Grecia. (Angelos TZORTZINIS | AFP)

El secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, ha exigido este lunes a Irán que «libere de inmediato» los dos petroleros griegos capturados el pasado viernes por la Guardia Revolucionaria iraní en el golfo Pérsico.

La milicia islamista de los Pasdaran (en persa) capturó el viernes el ‘Delta Poseidon’ y el ‘Prudent Warrior’ en el golfo Pérsico después de que Grecia se incautase de un buque iraní que transportaba petróleo.

Ambos petroleros están compuestos por una tripulación total de 49 personas, entre ellos nueve griegos y el resto filipinos.

En virtud de las sanciones occidentales por la guerra de Ucrania, las autoridades griegas se incautaron de un cargamento de crudo iraní transportado por un petrolero ruso, el Pegas, el 15 de abril frente a la isla mediterránea de Eubea. El tranquero, rebautizado con el nombre de Lana, transportaba 115.000 toneladas de petróleo iraní.

Atenas anunció el jueves pasado que transferirá el petróleo a EEUU tras la decisión en este sentido por parte de un tribunal de primera instancia de Chalkida, lo que llevó a Teherán a tildar de «inaceptable» que «Grecia se haya rendido ante las presiones de Washington».

Un día después, la Guardia Revolucionaria, cuerpo paramilitar creado en 1979 por al ayatollah Jomeini para defender la «Revolución Islámica» de injerencias extranjeras y ataques internos, informó de la captura de los petroleros griegos en aguas del golfo Pérsico por diversas irregularidades, aunque no concretó acusación alguna.

«Acto de piratería»

Blinken ha mantenido una conversación telefónica con el ministro de Asuntos Exteriores griego, Nikos Dendias, en la que ha «condenado en los términos más duros» la toma de las dos embarcaciones.

El portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Ned Price, ha señalado que «el continuo acoso de Irán a buques y su interferencia en los derechos y libertades de navegación son una amenaza para la seguridad marítima y la economía global», y ha advertido de que «EEUU apoya a Grecia, socio y aliado clave en la OTAN, frente a esta toma injustificada».

El Gobierno de Atenas calificó la captura de los buques por parte de Irán de «acto de piratería», mientras el portavoz del Servicio Europeo de Acción Exterior de la UE, Peter Stano, señaló el domingo que la «incautación» de los buques es «inaceptable» y pidió «una rápida aclaración, resolución y reducción de la tensión».