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Un mando de los Mossos justifica el uso de proyectiles de foam en las protestas por Hasél

El sargento de la Brigada Móvil de los Mossos d'Esquadra, responsable sobre el terreno el día que una joven perdió un ojo en una protesta por la detención Pablo Hasél, ha defendido el uso de proyectiles de foam pese a la escasa visibilidad que había en ese momento.

La joven que perdió el ojo, herida durante la actuación policial. (@angelgarciafoto)

El sargento de la Brigada Móvil (Brimo) de los Mossos d'Esquadra, responsable sobre el terreno el día que una joven perdió un ojo en una protesta por la detención del rapero Pablo Hasél en Barcelona, ha defendido este miércoles ante el juez el uso de proyectiles de foam aunque había mala visibilidad por el humo que emanaba de contenedores quemados. Según él, «no estaba garantizada la seguridad de la línea policial».

El sargento ha realizado las declaraciones al declarar como investigado ante el titular del Juzgado de Instrucción 1 de Barcelona. Fuentes judiciales han explicado que este policía, que coordinaba seis equipos de la zona en la que la joven fue herida, solicitó a la sala de mando el uso del foam y que se lo autorizaron.

Asimismo, el investigado no recuerda ningún incidente ni que el Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM) se llevara a una persona herida, algo de lo que se enteró «con posterioridad».

Acusación particular

Al salir de las declaraciones, el abogado de la acusación particular, Xavier Muñoz, ha explicado a los medios que el sargento no ha querido responder a la acusación, motivo por el cual no han podido averiguar por qué los agentes utilizaron el foam «más lesivo» ni las condiciones de la zona.

«El hecho de que no quiera declarar a las preguntas de las acusaciones nos deja carentes de instrumentos para ejercitar el principio acusatorio. Como la Fiscalía no está asistiendo en estas diligencias, no hay preguntas de la acusación, y solamente se están respondiendo a preguntas de las defensas», ha criticado.

Asimismo, ha manifestado que «a la práctica significa que es una declaración de investigado absolutamente carente de los más mínimos principios» para poder esclarecer los hechos.

Muñoz también ha revelado que el sargento ha insistido en que las balas de foam y sus lanzadoras «no son instrumentos de precisión», aunque el cuerpo, en un principio, defendía que sí que lo eran.