Otro vídeo de Sagardui confirma sus afirmaciones más preocupantes
Las palabras de Sagardui sobre la movilidad, los consultorios atendidos por personal de Enfermería y los cierres en época vacacional, el llamado «cambio cultural», no fueron ni un calentón ni una improvisación. Ya las dijo unos días antes palabra por palabra.
«Nos enfrentamos al reto de trasladar a la ciudadanía que estamos ante un cambio de cultura, de usos y costumbres, en nuestra relación con los servicios sanitarios. Habrá que desplazarse con más frecuencia para determinados procesos, habrá consultorios que estén atendidos por servicios de Enfermería o, incluso, que permanezcan cerrados en épocas como las que se avecinan, las vacacionales. Recurriremos a consultas telemáticas y a herramientas de triaje».
A las lectoras y lectores más interesados en la materia, estas palabras de la consejera de Salud del Gobierno de Lakua, Gotzone Sagardui, les sonarán familiares. Las habrán leído y escuchado en varias ocasiones. Es más, han sido objeto de una gran polémica y en su contra se pronunciaron organismos profesionales, los sindicatos, los grupos de la oposición y hasta el PSE confesó el lunes que le parecieron «muy desafortunadas y así se lo trasladamos al Departamento».
Sin embargo, estas declaraciones no son las efectuadas por la consejera en el Executive Forum el pasado 8 de junio, que fueron las que saltaron a los medios de comunicación de inmediato y que incluso el Departamento de Salud remitió a los medios en formato de vídeo. Estas palabras fueron pronunciadas por ella, pero unos días antes, el 25 de mayo, en una jornada organizada por “Redacción Médica” en Madrid, y de la que también hay un vídeo disponible en la red.
Si se fijan, comprobarán que hay sutiles diferencias, como que allí no habló de «cambio cultural» sino de «cambio de cultura». Aunque, en definitiva, la conclusión es la misma: movilidad, consultorios atendidos por profesionales de la Enfermería en lugar de por médicos y cierres en verano.
Lamento y negación
En su comparecencia ante la comisión parlamentaria del lunes, Gotzone Sagardui «lamentó» que sus «palabras hayan generado inquietud a la ciudadanía y a los profesionales», pero ni las retiró ni las explicó.
Lo que la intervención de la consejera de Salud en el “Café de Redacción” de Madrid evidencia es que esas afirmaciones no son fruto ni de un calentón ni de una improvisación, sino que forman parte de un discurso que Sagardui ha pronunciado al menos ya en dos ocasiones.
Atendiendo a ambas intervenciones, se observan las labores de corta y pega de quien las redacta y los cambios de orden de algunos párrafos.
Y las dos veces, la consejera aseguró también, en términos casi textualmente idénticos, que «en todo esto la Enfermería va a tener un papel fundamental. Ya lo tiene, diría yo. La formación y cualificación del personal de Enfermería les va a hacer protagonistas de muchas actuaciones que tradicionalmente se derivaban al facultativo y que ahora entran dentro del ámbito de sus competencias».
Lo llamativo es que después de haber repetido estas palabras en dos foros diferentes, la consejera de Salud de Lakua asegurara el pasado viernes ante el Pleno del Parlamento, y así consta en el diario de sesiones, que «solo puedo calificar de despropósito que de mis palabras en la conferencia se pudiera concluir, y cito textualmente, que hemos anunciado una nueva estrategia de atención primaria de improviso. No. Que el personal de enfermería va sustituir al de medicina. No es así. Que vamos a cerrar consultorios porque no vamos al modelo de atención primaria en cercanía. No es así».
«Todo no puede ser»
En su alocución en Madrid, Sagardui también dijo que «habrá que asumir una mayor movilidad». Incidió en que «en Euskadi somos un territorio pequeño, pero muy grande en ambición, como ustedes saben, porque aspiramos a la excelencia, y aspiramos a la excelencia en nuestro sistema de salud». Añadió que «tenemos una buena base de comunicación, de medios de transporte, de redes de carreteras, transporte público muy extendido. No debiera ser por tanto un problema esta movilidad. Pero lo es. Cualquier cambio, por pequeño que sea, se vive en términos de pérdida».
Y la consejera empezó a enumerar que «la ampliación de las urgencias del Hospital Universitario de Araba, unas urgencias modernas, impresionantes a nivel de dotación, a nivel de tamaño, que ha supuesto el traslado de una parte de las urgencias del Hospital de Santiago, (dos hospitales en una misma ciudad, a escasa distancia entre ellos)… un conflicto». Igual que «la unificación de la Cirugía Cardíaca compleja en los hospitales de Cruces y Basurto, que distan cuatro kilómetros entre ellos… La propuesta de traslado de la actividad quirúrgica del Hospital de Bidasoa al Hospital Donostia mientras se realizaban las obras de reforma, todo es conflicto».
Sagardui puso como último ejemplo el de la Protonterapia. Aseguró que «su ubicación no es un asunto menor, ni para la ciudadanía, que quiere ir a su hospital, a su centro de salud, ni para los y las profesionales de la red que quieren todo en su (acentuado) hospital, en su centro de salud, y todo no puede ser».