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La Real se corona desde los once metros y logra un triunfo histórico en Old Trafford

Inmejorable estreno de los donostiarras en esta edición de la Europa League, sumando los tres puntos de la visita al Manchester United gracias a un gol de penalti marcado por Brais Méndez (0-1).

El balón golpea en el brazo de Lisandro tras el disparo de Silva y el árbtiro ha señalado penalti. (OLI SCARFF | AFP)

Rigor, trabajo, seriedad defensiva y aprovechar las escasas oportunidades. Todo eso y más hacía falta para ganar en Old Trafford, todo eso y más ha hecho la Real, que suma tres puntos y una victoria de esas que quedan en los libros de historia.

Y eso que muchos comentarios de los días previos parecían el muro de las lamentaciones, agravados con la lesión de Le Normand. Ese fatalismo tan querido por estos lares preveía poco menos que las siete plagas de Egipto. En la mente, aquel enfrentamiento en Turín, en el que los donostiarras fueron barridos por un ciclón rojo (0-4). Pero cada partido es un mundo.

En un día marcado por la muerte de Isabel II, el equipo de la corona en el escudo ha demostrado que no rinde pleitesía ni a quien se ha gastado más de 250 millones de euros en el mercado veraniego.

Durante la semana se hacían cábalas sobre quién sería su sustituto de francés en el centro de la zaga, si el también zurdo Pacheco o si el más experimentado Aritz Elustondo. Finalmente Imanol ha optado sacar a ambos y sentar a Zubeldia. Además, Sadiq y Kubo han ocupado las dos plazas más adelantadas, en lugar de Sorloth y Cho, titulares ante el Atlético.

Por su parte, el técnico del Manchester, el holandés Ten Hag, ha introducido seis cambios respecto al once inicial que derrotó el pasado fin de semana al Arsenal. Regresar a la Champions es la prioridad para los red devils, pero además se lo puede permitir porque tiene ‘suplentes’ de lujo como Cristiano Ronaldo.

El peligro, a cargo de CR7

El portugués ha tenido la primera ocasión poco antes de cumplirse el cuarto de hora, pero ha estado lento en la definición. Los años no pasan en balde. Poco más tarde Eriksen le ha puesto un buen centro al que no ha llegado. Y la tercera en el minuto 25, pero Pacheco le ha robado la cartera.

Tanto insistir, al final CR7 ha batido ha Remiro, pero el gol ha sido anulado por un claro fuera de juego. La Real sufría quizás menos de lo esperado y llegaba al descanso sin mayores sobresaltos, aunque con el balón le faltaba precisión en la salida para acercarse a la meta de De Gea. Pero la clave era no perder balones que permitieran a los Red Devils salir como flechas.

Ten Hag necesitaba una marcha más y al comienzo de la segunda parte ha metido de salida a Bruno Fernandes, posiblemente su mejor generador de juego. Por su parte, Imanol ha repetido el movimiento del día del Atlético, pero invirtiendo los papeles, y Sadiq ha dejado su sitio a Sorloth.

Cinco minutos de revolución

La primera ocasión de la Real ha llegado en el 53. Sorloth ha aprovechado su ventaja de estatura ante Lisandro Martínez –que también había entrado en el descanso– para cabecear ligeramente alto un centro desde la izquierda. El defensa argentino ha estado providencial dos minutos más tarde para impedir un remate del noruego tras gran jugada de Kubo.

La Real se ha venido arriba y en el córner siguiente un disparo de Silva ha golpeado de rebote en el brazo de Lisandro –que ha estado en todas– y el árbitro no ha dudado en señalar los once metros. El VAR lo ha corroborado. Brais no ha perdonado y ha puesto el 0-1 (m.58).

Tras un disparo de Kubo que ha repelido De Gea, Casemiro ha tenido el empate en un fallo de marcaje, pero ha picado demasiado el balón. El ex del Real Madrid lo ha vuelto a intentar desde lejos, pero Remiro se ha estirado bien para sacarla cerca del poste. Restaba un cuarto de hora y el Manchester no lograba encontrar las costuras de un equipo donostiarra muy serio.

El Manchester apretaba pero no hacía peligro, y la Real ha tenido el 0-2 en un contraataque conducido por Sorloth. Tampoco ha hecho falta. Si hacia mucho que la Real no daba la campanada ante un equipo grande –posiblemente desde aquella semifinal de Copa en el Bernabéu–, pocos escenarios mejores que Old Trafford. Y como guinda, sobre el césped ha terminado un equipo con Sola, Aritz, Pacheco, Aihen, Zubimendi, Barrenetxea y Turrientes. Siete canteranos.

Los cerca de 2.000 aficionados txuriurdines desplazados lo han disfrutado como merecía la ocasión.



Los donostiarras lideran ahora el grupo empatados con el Sheriff moldavo, que ha vencido 0-3 en el campo del Omonoia chipriota, que visitará Anoeta la próxima semana.