Marlaska, en la cuerda floja tras pedir la Fiscalía todos los vídeos de Melilla

Aunque el ministro del Interior español insiste en que no tiene intención de dimitir, su posición es cada vez más precaria, sobre todo después de que la Fiscalía haya pedido todas las imágenes de la actuación de la Guardia Civil en Melilla, que se saldó con la muerte de al menos 24 personas.

La Fiscalía ha solicitado al Ministerio español de Interior que le remita todas las imágenes de lo ocurrido en la valla de Melilla el pasado 24 de junio, cuando murieron al menos 24 personas. El Ministerio Público se suma así a la petición en el mismo sentido del Defensor del Pueblo y añade presión sobre el ministro Fernando Grande-Marlaska, cuya versión de lo ocurrido aquel trágico día cada vez se sostiene menos, igual que su cargo.

De hecho, el magistrado bilbaino posiblemente ya se habría visto obligado a dejarlo si no estuviera en el Ministerio en el que está y si tuviera un perfil menos mediático.

En cualquier caso, la posición de Marlaska es cada vez más precaria, sobre todo tras la difusión de un reportaje de la BBC que pone en tela de juicio su versión y la reciente visita a Melilla de un grupo de diputados integrantes de la Comisión de Interior del Congreso, algunos de los cuales han puesto de manifiesto que sí que hubo migrantes muertos en territorio gestionado por las autoridades españolas.

«No hablamos de la zona de tránsito o de lo que incluso el ministro del Interior llamaba zona de nadie, sino en territorio bajo control español», expuso el pasado lunes Jon Iñarritu, diputado de EH Bildu, que pidió al ministro que «deje de escurrir el bulto», ya que, según añadió, en los vídeos que pudieron ver «aparecían varios de los cuerpos inertes; es decir, heridos o muertos».

El parlamentario soberanista señaló que el foco está en «quién permitió y por qué la entrada de agentes marroquíes en territorio español», y en «quién retiró los cuerpos y los heridos que se produjeron en territorio español».

En parecidos términos se expresaron los representantes de Unidas Podemos y ERC que se desplazaron a Melilla y que rebatieron lo manifestado durante todos estos meses desde el Ministerio del Interior.

Saltos temporales en las imágenes

Tres días después, la petición de la Fiscalía y las razones expuestas para hacerlo acentúan el descrédito del ministro. Y es que, según difundió el miércoles la Cadena Ser, la fiscal de Sala de Extranjería, Beatriz Sánchez, que es la encargada de investigar los hechos, ha detectado saltos temporales de momentos «relevantes» en el contenido que le remitió el Ministerio del Interior, capturado por las propias Fuerzas de Seguridad del Estado. Según la fiscal, las imágenes comprenden episodios determinantes de la actuación policial que deberían haber sido grabados por el dron y el helicóptero de la Guardia Civil. Sin embargo, no están en el material que les han aportado.

Y si en el análisis de los hechos la versión del ministro es cada vez más insostenible, en la arena política se multiplican los dedos que le señalan. El miércoles, su compañera de Gabinete, la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, pidió «una profunda investigación», dado que «con los derechos humanos no se juega, no son relativizables», mientras, desde el otro extremo, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, exigió «responsabilidades» al presidente Pedro Sánchez y al propio Marlaska, sin descartar el apoyo de su partido a crear una comisión de investigación parlamentaria.

Ayer, desde Gasteiz, la electa del PNV Maitane Ipiñazar pidió «una investigación inmediata e independiente, porque es necesario esclarecer los hechos y depurar responsabilidades». «Hay que establecer medidas para la reparación de las víctimas –añadió–; eso debería ser el objetivo de cualquier Estado democrático».

Aunque el espacio se le achica al exmagistrado, este aseguró ayer que no se plantea dimitir «en modo alguno», e insistió en defender la intervención de la Guardia Civil, de la que dijo que «actuó en términos de legalidad, proporcionalidad y necesidad adecuadas a las circunstancias».

No informa

El Gobierno español no ha respondido a la pregunta de EH Bildu sobre el número de cámaras en la valla de Melilla al estar declarado «secreto», y se ha remitido a la Ley de Secretos Oficiales.

Hasta fin de año

La Fiscalía tiene hasta finales de año para emitir las conclusiones de la investigación y valorar si hay hechos delictivos, y decidir si en consecuencia presenta una querella o archiva el caso.