Osasuna emprende la tarea de romper la racha de dos meses y medio sin ganar en El Sadar

Dos meses y medio –con parón mundialista de por medio– lleva Osasuna sin ganar en El Sadar. Quiere romper esta racha ante un Mallorca –sábado, 18.30, GolTV– que esta temporada resulta ser un visitante incómodo.

Recuperar la autoestima casera y sumar la primera victoria liguera de 2023 es el objetivo de Osasuna en su retorno a El Sadar, después de haber mediado un prolongado parón mundialista y sendos derbis a domicilio.

Por ambas circunstancias y una derrota antes de la cita catarí frente a un Barcelona en inferioridad numérica, la escuadra navarra lleva dos meses y medio sin brindarle una alegría a su afición, una dinámica que recuerda a la pasada campaña.

Romper esa racha no sea tarea sencilla, pues rinde visita al estadio iruindarra un Mallorca que viene en buena línea y al que los rojillos no logran vencer en Primera en Iruñea desde hace 14 años.

Vistos esos precedentes y el hecho de que los de Jagoba Arrasate han regresado a la competición con el punto de mira un tanto desviado, será necesario dar un golpe de timón en el juego y rendimiento en ataque del equipo.

Después del ejercicio defensivo del que hizo gala el equipo en un escenario exigente como San Mamés, ahora le tocará frente a los bermellones dar un paso adelante para generar ocasiones e incluso transformarlas si quiere doblegar a los isleños.

Para ello, bien podría el técnico de Berriatua incluir algunas variaciones en el once, incluyendo piezas más creativas –por ejemplo, Aimar por Darko– y de mayor filo, como sería el caso de un Chimy Ávila que se quedó en el banquillo por decisión técnica en el duelo frente a los leones.

Junto a ello, todo apunta a que el preparador vizcaino le dará continuidad en el lateral derecho a Diego Moreno, en lo que sería para el cirbonero su estreno en El Sadar con el primer equipo en partido oficial.

También cabe esperar el regreso de Unai García al eje de la zaga tras cumplir su castigo y dado que Aridane dejó sensaciones contrapuestas en San Mamés, con algunos errores gruesos de digerir.

El Mallorca, por su parte, aterriza en la capital navarra con solo una derrota –Getafe– en los últimos siete enfrentamientos que ha acometido, sumando envites ligueros y coperos desde principios de noviembre.

Su entrenador, el siempre bien estimado Javier Aguirre, ha confirmado que en el equipo inicial bermellón estarán Maffeo y Kang in Lee. Como advertencia, su bloque es el sexto mejor visitante de la competición, pues ha ganado en Vallecas, Mestalla y Villarreal, además de empatar en Bilbo y Elche.

Arrasate: «Paso al frente»

Arrasate ha explicado en la previa que los suyos deben dar un «paso al frente» en este encuentro, después de que se haya «hecho largo» volver a jugar en El Sadar y «encontrarnos con nuestra afición».

Después del punto sumado en San Mamés, el míster rojillo ha admitido que «el estado anímico es mejor», aunque ha avisado de que el Mallorca es un rival «muy complicado, que llega en un gran momento, es ordenado y al que es muy difícil generarle ocasiones».

Para conseguirlo, los suyos tendrán que sacar a relucir «velocidad, fluidez y juego en campo rival, para que estén incómodos», centrándose en lo inmediato porque «estamos en una fase en la que cada partido es muy importante» y aparcando provisionalmente el duelo copero de entre semana frente al Betis.

«Tenemos que mejorar la fase ofensiva con balón para que el Mallorca pueda sufrir o se puedan producir esos desajustes en su entramado defensivo. Si no es así, vamos a tener dificultades», ha profundizado.

En ese sentido, ha avanzado que «seguramente» sea su equipo el que lleve la iniciativa en el envite, procurando no cometer pérdidas peligrosas y llevando «un ritmo alto, a la par que mantener la paciencia».