Haritzalde advierte de la construcción de un «macropolígono» logístico en Belartza Goikoa
El proyecto, en el término municipal de Donostia, ocupará unos 210.000 metros cuadrados, buena parte de los cuales serían para la multinacional Amazon. En 2016 se efectuó un vertido ilegal de rocas que no ha sido retirado ni por la empresa ni por el Ayuntamiento, pese a la sentencia del TSJPV.
El ámbito de Belartza Goikoa, entre el barrio donostiarra de Añorga y la localidad de Lasarte-Oria, podría acoger en el futuro un polígono industrial con una superficie superior a los 200.000 metros cuadrados. En principio el proyecto contempla un enorme centro logístico, que según el colectivo ecologista Haritzalde pertenecerá a una empresa conocida «por su venta ‘detail’ en internet». Es decir, el centro que en principio Amazon iba a construir en Oiartzun y del que luego desistió.
También habría espacio para pabellones de otras empresas, comercios, una gasolinera y un hotel, otro, con ocho plantas de altura. Según publica este martes ‘Noticias de Gipuzkoa’, el Gobierno municipal ya tiene listas sus respuestas a las alegaciones presentadas por asociaciones de comerciantes, asociaciones vecinales, clubes deportivos, grupos ecologistas o partidos políticos, y tras ello dará luz verde al proyecto.
En una nota, Haritzalde ha advertido de la poca luz que se está arrojando sobre ello. «No hay publirreportajes ni fotos a color, no hay titulares ni noticias al respecto, ni portavoces que alardeen de lo que el Gobierno Municipal está a punto de aprobar a marchas forzadas».
Desde 2016
Por hacer un poco de memoria, este colectivo recuerda que este ámbito es objeto de polémica desde 2016, cuando se denunció el vertido de cerca de 150.000 metros cúbicos de rocas procedentes de las cercanas obras de Mercadona y McDonalds. Tres años después, el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco certificó la ilegalidad de dicho vertido.
No obstante, la empresa siempre ha hecho oídos sordos a los requerimientos y las multas del Ayuntamiento, que también anunció que retiraría los escombros pero que no lo ha hecho, «solo se ha llevado a cabo una ínfima extracción de materiales por algunos camiones entre el 10 y el 13 de enero». Es más, todo apunta a que esas rocas se van a emplear en el futuro polígono. En el Plan Parcial se recoge que «la nueva configuración de Añ 13.1 integrará definitivamente los excedentes de tierras producidos en el movimiento de tierras del ámbito Añ 13.2 Cantera».
«Esta maniobra urbanística es conocida como la maniobra o política de hechos consumados, en la que una vez efectuado un daño irreparable de manera clandestina, con colaboración o elusión de responsabilidades por parte de la administración implicada, cualquier actor que desee denunciarlo estará obligado a acudir a la vía judicial, con sus costes y tempos, sin que además el daño pueda ser evitado en la mayoría de casos. Así queda el terreno allanado al arrebatar definitivamente el valor ambiental al lugar artificializado o reduciéndolo lo más posible», explica Haritzalde.
Ahora, apunta el grupo ecologista, se va a eludir la ley que impide la construcción de nuevas grandes superficies comerciales «disfrazándolo de polígono industrial mixto». Otro «dardo envenenado para el pequeño comercio donostiarra, tan maltrecho por la reciente ampliación de Garbera o la aprobación de nuevos espacios comerciales en San Bartolomé», donde además se prevé un nuevo aparcamiento de 200 plazas en el mismo centro de la ciudad.