Salud pacta con el SMN y planea contarlo hoy al resto de sindicatos
El acuerdo entre el Sindicato Médico y Salud está cerrado. Solo buscan el mejor momento para comunicarlo. La idea es llevarlo este viernes a la Mesa General de la Función Pública, el foro al que han puenteado con las negociaciones paralelas que darán fin al paro de facultativos.
La consejera Santos Indurain se cuidó ayer de hablar siempre de «preacuerdo» con el Sindicato Médico (SMN). Solo después de que pase por la Mesa General de la Función Pública podrá hablarse de pacto, dijo la titular de Salud.
Indurain se negó a confirmar a los periodistas que hay acuerdo con el SMN, pero NAIZ puede confirmar que sí, que el documento ya se ha cerrado. El contenido se presentará hoy en esa mesa, que precisamente está compuesta por los sindicatos LAB, UGT, ELA, CCOO, Steilas, que hicieron huelga el miércoles para tratar de poner fin a este diálogo a dos con el SMN.
El detalle del acuerdo no había sido trasladado a los integrantes de la Mesa General de la Función Pública, por lo que lo más probable es que no se vote en la sesión de hoy a las 11.30 horas. Habrá que esperar a la reunión siguiente de este foro, cuya fecha está por fijar. Deberá ser el Gobierno quien concierte la cita.
Uno de los elementos clave será el mantenimiento, en sus mismos términos, del régimen de exclusividad. En este punto, Salud ha dado un paso atrás después de que incluso la lehendakari María Chivite se pronunciara a favor de la eliminación de la medida.
La duda recae en qué hará el Gobierno en caso de que la mesa no valide los términos del pacto alcanzado. El acuerdo necesita, sí o sí, pasar por mesa. En caso contrario, se incurriría en un defecto de forma, pues en él se tratan temas retributivos para un colectivo de funcionarios.
Se sabe que en la última oferta del Gobierno se había puesto encima de la mesa una subida salarial de 400 euros al mes. La última contraoferta pública del SMN (ha habido otra posterior, que no recibió difusión) exigía un aumento de mil.
Ahora bien, la Mesa General funciona como un órgano consultivo. Esto es, en caso de que la mayoría sindical de la Función Pública no dé el visto bueno a lo alcanzado, el Gobierno deberá elegir si sigue adelante con el acuerdo o atiende a la mayoría sindical.
En consecuencia, tampoco se sabe qué hará el SMN. Si decide dar por terminada la huelga de inmediato o si esperará al resultado de la votación de la mesa y de la decisión que, con ello, adopte Osasunbidea.