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El PNV recuerda el Acuerdo de Viernes Santo como un «hito político del siglo XX en Europa»

El PNV ha afirmado que el Acuerdo de Viernes Santo, que este lunes cumple 25 años, supone «uno de los hitos políticos significativos del siglo XX en Europa» porque posibilitó el fin de «una etapa infausta de terror» y «abrió un futuro de esperanza».

Foto de archivo de Gerry Adams saludándose con Arnaldo Otegi y Joseba Egibar. (GARA)

Como «un hito político del siglo XX en Europa» ha calificado el PNV el Acuerdo de Viernes Santo en su 25 aniversario. Y cree que demuestra que no hay «conflictos irresolubles» y que es posible la solución sobre «la voluntad, del acuerdo y la determinación».

En un comunicado, la formación jeltzale se ha mostrado convencida de que hoy es posible afirmar, «con cierta perspectiva histórica», que aquel acuerdo constituyó «un éxito en el largo camino hacia la paz definitiva en Irlanda, a pesar de los periodos de estancamientos institucionales y de los esporádicos episodios de violencia registrados en este tiempo».

«El Acuerdo de Viernes Santo, además, ha permitido salvar muchas vidas y ha supuesto un verdadero estímulo para la prosperidad económica y el bienestar social de la ciudadanía más directamente concernida», ha añadido.

Además, ha considerado que, «aunque no haya dos situaciones iguales, la compleja resolución de este conflicto tiene una dimensión universal que también puede inspirar a otros vigentes a la hora de encontrar vías de solución».

«El Acuerdo de Viernes Santo demuestra que no debe haber conflictos irresolubles ni eternos. Y que siempre es posible encontrar vías de solución sobre la base de la voluntad, del Acuerdo y de la Determinación», ha indicado.

Por ello, el PNV cree que «muchas son las enseñanzas» que se pueden y deben extraer «de este largo y sinuoso proceso», entre ellas, «el valor de la política por encima de cualquier forma de coacción o de expresión de violencia».

«En este sentido, el coraje y el liderazgo político que ejercieron los y las dirigentes participantes en las negociaciones, por encima incluso de las propias organizaciones armadas, resultaron vitales a la hora de poder alcanzar un acuerdo 'in extremis'», ha destacado.

A su juicio, ante «el bloqueo histórico interno, la determinación de los Gobiernos de Londres y Dublín, proponiendo vías de solución, y el necesario acompañamiento internacional, con la decisiva implicación del Gobierno de los Estados Unidos», fueron dos factores «decisivos» para la conducción de las negociaciones «y para encauzar y garantizar el Acuerdo».

Acuerdo inclusivo

El PNV ha destacado que el Acuerdo de Viernes Santo fue «principalmente inclusivo», ya que logró integrar a actores internos y a partidos políticos del Norte de Irlanda e involucró también a los Gobiernos de Londres y Dublín en las nuevas instituciones creadas, «siempre en favor de una solución pactada que vinculase a todos los firmantes».

También ha elogiado «el papel activo» que desempeñó una parte de la sociedad civil, «hastiada de la deteriorada situación social, pero movilizada en la defensa de los derechos humanos y en la promoción activa de la paz».

Por todo ello, ha añadido, el partido que lidera Andoni Ortuzar valora el 25 Aniversario del Acuerdo de Viernes Santo como «uno de los hitos políticos significativos del siglo XX en Europa». «Un acontecimiento que posibilitó, en primer lugar, terminar con una etapa infausta de terror y de dolor humano, y que, seguidamente, abrió un futuro de esperanza, de paz y de bienestar para las nuevas generaciones de irlandesas e irlandeses», ha explicado.

Según la formación jeltzale, «a día de hoy», avanzada la tercera década del siglo XXI, el Norte de Irlanda «se enfrenta a otro tipo de retos, condicionada por una nueva realidad política, por el protocolo para Irlanda del Norte renovado recientemente en el acuerdo-marco de Windsor y también por las consecuencias de un Brexit que allí fue rechazado en referéndum».

«Los escenarios y las posibles salidas para su sociedad son hoy diversos. Pero es el propio Acuerdo de Viernes Santo el que sienta las bases del futuro, a partir del derecho de autodeterminación residenciado en el pueblo de Irlanda del Norte», ha concluido.