LAB presenta su nueva Secretaría Antirracista: «El sindicato ha sido mi casa»
La nueva Secretaría Antirracista del sindicato LAB pretende desarrollar una «consciencia antirracista» en el camino hacia un «nuevo sindicalismo». Su presentación ha coincidido con unas elecciones que constataron el aumento de la extrema derecha, una situación que preocupa al sindicato.
El sindicato LAB ha presentado este sábado la recientemente creada Secretaría Antirracista, la nueva estrategia con la que esta central pretende apostar por un «nuevo sindicalismo» y «construir herramientas útiles para la defensa de derechos y la organización colectiva» de los trabajadores inmigrantes y racializados. Además, han presentado el Plan Estratégico de sindicalismo antirracista derivado de un proceso colectivo.
Varias decenas de personas han acudido a la presentación de esta nueva herramienta sindical, que se ha celebrado en Bira Kultur Gunea de Bilbo. Durante el acto, se han podido escuchar los testimonios de Jannet Carmona y Houssine Yagoubi, trabajadores inmigrantes que hoy día ocupan los cargos de delegada del sector de limpieza en Bilbo y presidente del comité de empresa de Huerta de Peralta, respectivamente. La coordinadora general de LAB, Garbiñe Aranburu, y la responsable de la Secretaría Antirracista, Josefina ‘Txefi’ Roco, también han participado.
Según Aranburu, el actual sistema «utiliza como forma de dominación hacia la clase trabajadora la precariedad, el machismo y también el racismo» para poder subsistir. De esta forma, pretende «generar diferentes brechas entre la clase trabajadora». Un «cóctel peligroso», ha advertido, que beneficia especialmente a la extrema derecha.
«El fascismo se está aprovechando de esta situación, la división de la clase trabajadora. Nos preocupa mucho el auge del fascismo a nivel mundial y a nivel europeo, pero también en los dos estados que nos oprimen», ha destacado, antes de recordar los resultados de PP y Vox en los comicios del pasado fin de semana.
Ante ello, ha destacado la «incidencia limitada» de estas fuerzas en Euskal Herria, donde se ha visto fortalecida la presencia de la izquierda independentista en las instituciones, un hecho que Aranburu ha valorado como «bueno, pues tiene un valor muy importante a nivel social y sindical».
Por su parte, Roco ha detallado en qué consisten las cuatro «dimensiones principales» que constituyen el Plan Estratégico de sindicalismo antirracista de LAB. En primer lugar, ha subrayado la necesidad de desarrollar una «consciencia sindical antirracista» como paso para tener herramientas que permitan «identificar y desmontar en nuestras prácticas cotidianas la presencia de prejuicios, sesgos y racismo».
A continuación, ha apostado por adoptar el «antirracismo en todo el sindicato», lo que implicaría «revisar y adaptar varias cuestiones en aras a facilitar la accesibilidad, la presencia y la participación de las trabajadoras migradas y racializadas». En este sentido, también se ha mencionado el impulso de una «acción socio-sindical antirracista» que explore «nuevas formas de lucha y de organización colectiva». Finalmente, para construir una Euskal Herria «de acogida con derechos y oportunidades para todos», LAB ha exigido «incidencia social y política» para avanzar en este aspecto.
«Situación de semiesclavitud»
En nombre de los trabajadores inmigrantes y las personas racializadas, Jannet Carmona y Houssine Yagoubi han compartido su experiencia trabajando en Euskal Herria y como ese camino los llevó finalmente a formar parte del sindicato LAB, del que hoy día ambos son delegados sindicales.
Carmona se incorporó a LAB en 2008, hace 15 años. «Cuando llegué de Ecuador ya venía con una cierta conciencia de clase, después de haber trabajado en grupos de jóvenes. Al llegar aquí descubrí a LAB, un sindicato con compromiso con las trabajadoras precarizadas», ha recordado. Sin embargo, los primeros pasos en el sindicato no fueron fáciles debido a las inseguridades que le ocasionaba ser una trabajadora migrada.
«Te veían como la chica de fuera. “¿Cómo va a ser ella delegada?”, decían. Sin embargo, cuando comienzas a trabajar codo con codo con esa gente, a ayudarles en sus problemas laborales, se dan cuenta que no hay diferencias, que estamos en las mismas condiciones», ha recordado sobre esos días. «Para mí, LAB ha sido mi casa», ha añadido.
En unos términos parecido se ha expresado Yagoubi, trabajador de Huerta de Peralta desde 2012 y presidente del comité de empresa desde 2017. El también delegado de LAB ha rememorado las condiciones que existían en la empresa, de la que un 90% de la plantilla es inmigrante, y que Yagoubi ha definido como «una situación de semiesclavitud». Con la entrada de LAB en la empresa, los trabajadores se organizaron y convocaron varias jornadas de huelga, consiguiendo que se cumplieran «los artículos principales del convenio agropecuario».
Respecto a la Secretaría Antirracista, Yagoubi espera que sirva para que «los trabajadores pierdan el miedo y que sientan que están en casa, que son un trabajador más de este país». «Es una herramienta eficaz y justa para solucionar los problemas, ha llegado a tiempo», ha destacado.
La presentación ha contado con las actuaciones musicales de Celeste e India, al principio, y el rapero y «artista multifacético» Betto al final, con canciones que versan sobre la experiencia migratoria.