Una concentración reclama en Donostia justicia para Ion Aranburu, víctima de un ataque fascista

Una concentración en el barrio del Antiguo ha denunciado este jueves el ataque fascista «organizado y premeditado» del que fue víctima el pasado 27 de mayo su vecino Ion Aranburu en Soria, que se encuentra hospitalizado en Burgos. Familia y amigos piden justicia.

Una concentración en una abarrotada plaza Gaskuña, en el barrio donostiarra del Antiguo, ha denunciado este jueves a la tarde la brutal agresión que sufrió el pasado 27 de mayo en Soria a manos de ultras su vecino Ion Aranburu. 

Ha sido una nutrida movilización en la que han participado alrededor de 500 personas, encabezada por una pancarta con el lema «Eutsi Ion», rubricado por familia y amigos, quienes han subrayado que se trató de un ataque fascista «organizado y premeditado», en una jornada sin ningún tipo de incidente previo.

«Acudieron a un bar donde se encontraba gente de Soria y reinaba el buen ambiente en todo momento, hasta que pasadas las 18.00 se produjo en indiscriminado ataque por parte de ultras del Leganés y Orgullo Numantino hacia la gente del Cornellà», han detallado en el comunicado leído.

«Queremos recalcar que este ataque fascista fue indiscriminado sobre toda persona que se encontrase allí presente, sin importar edades ni colores y empañando un día de reencuentro entre amigos», han destacado.

En declaraciones a varios medios, el amigo de Aranburu que le acompañó a Soria para juntarse con un excompañerp de trabajo y amigo de Cornellà ha explicado que «Ion no llevaba ningún distintivo ni de la Real ni del Numancia, ni del Cornellà».

Gravedad de los hechos

En la movilización se ha insistido en la gravedad del ataque fascista, protagonizado por alrededor de 70-80 personas en los aledaños del Estadio Los Pajaritos, que emplearon piedras, botellas y mobiliario del propio bar al que irrumpieron agrediendo «indiscriminadamente» a quienes se encontraban en el establecimiento, entre ellos Aranburu, junto a dos amigos de Donostia y Cornellà. «Fueron a cazar al único que se salió del bar», rememora el amigo donostiarra que le acompañaba.

La premeditación de la acción, según han apuntado, tiene otra prueba en que grupos de ultraderechistas de Soria, Zaragoza y Madrid habrían realizado una capea antes.

Aranburu, a pesar de que ha ido evolucionando favorablemente al tratamiento en el hospital de Burgos, a donde fue trasladado desde Soria dado que se encontraba en estado crítico, sigue grave. Lo han querido remarcar su familia y amigos a la vista de las informaciones difundidas por algunos medios y el propio atestado de la Policía española.

«Ion fue trasladado al hospital de Soria en estado muy grave y, debido a esta gravedad, se le tuvo que inducir el coma y trasladarlo al hospital de Burgos, donde sigue en coma, en una UVI móvil. Queremos recalcar y condenar que está en estado crítico, y que no se trata, como dijeron los medios de comunicación y el Cuerpo Nacional de Policía y como se refleja en el atestado, de un herido leve», han aclarado en la concentración.

«No vi la agresión. Pero tiene una rotura en la base del cráneo atrás y él cae a plomo. Eso significa que le han dado con algo en la espalda. Es lo que me dijo el médico», expone quien acompañó a la víctima.

Además, han criticado la «inadecuada» actuación policial para un evento deportivo como el partido de fútbol entre el Numancia y el Cornellà, «con tan solo un coche patrulla». El propio testigo de la agresión interpeló a los agentes por ellos, al que contestaron que «no estamos solo para el fútbol, tenemos una carrera ciclista.

En la concentración de este jueves han puesto a la venta camisetas con el fin de apoyar a la familia.