Entre el rosa y lo nuclear
Las salas de cine vivirán este fin de semana una extraña eclosión que fusionará el nuclear en blanco y negro de Christopher Nolan y el rosa festivo y reivindicador de Greta Gerwig. Un fenómeno que ha sido bautizado como ‘Barbenheimer’ y que se traducirá en una práctica olvidada en los últimos tiempos: la doble sesión. Casi seis horas de disfrute fílmico a través de dos películas que no guardan relación pero que comparten una gran calidad.
Caos y muñecas se citan dentro de un contexto que, como no podía ser de otra manera en los tiempos actuales, comenzó siendo un meme en los que Margot Robbie asomaba rosa y sonriente delante de un hongo nuclear. Lo que comenzó en clave de broma se ha consolidado como una realidad muy a tener en cuenta si nos atenemos a los datos ofrecidos desde Estados Unidos por la potente cadena de salas AMC, que revela que esta semana 40.000 espectadores ya habían comprado entradas para ver ambas películas el mismo día, más del doble que la semana pasada.
Twitter también se ha hecho eco de esta experiencia y son muchos los que bromean y recomiendan que entre ambas películas el espectador se de un respiro si en primer lugar se elige la opción más lógica de visionar ‘Oppenheimer’ y después ‘Barbie’. En todo caso, este fenómeno repercute positivamente en una Industria necesitada de estímulos, aunque sean nucleares y rosas.