Gabilondo reúne 487 testimonios de abusos en la Iglesia y denuncia que esta los negó y minimizó
El informe sobre abusos sexuales en el seno de la Iglesia elaborado por el Defensor del Pueblo español recoge los testimonios de 487 víctimas, la mayoría hombres, pide crear un fondo estatal para compensarlas y denuncia cómo la jerarquía católica negó y minimizó el problema durante mucho tiempo
Un 0,6% de la población del Estado español mayor de 18 años, unas 236.000 personas, ha sufrido abusos en la Iglesia por parte de algún sacerdote o religioso, según una encuesta de GAD3 encargada por el Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo, para el ‘Informe sobre abusos sexuales en el ámbito de la Iglesia católica y el papel de los poderes públicos’ que le encargó hace un año y medio el Congreso y que ha entregado este viernes a la presidenta de la Cámara Baja, Francina Armengol.
Se trata de un documento de 777 páginas titulado ‘Una respuesta necesaria’, que no cuantifica el número total de posibles víctimas de los abusos y se limita a recoger los datos de esta encuesta a 8.013 personas mayores de edad que revela que un 11,7% de la ciudadanía ha sufrido abusos sexuales antes de cumplir 18 años. De acuerdo con los resultados de la encuesta, el 1,13% de la población mayor de edad revela que ha sufrido abusos en el ámbito religioso –unas 445.000 personas–, y un 0,6% por parte de un sacerdote o religioso –236.500 personas–.
En una rueda de prensa, Gabilondo ha explicado que se ha recogido el testimonio de un total de 487 víctimas, un 87% de ellas hombres, que han denunciado abusos sexuales en la Iglesia ante la unidad de atención a víctimas de la comisión creada por la institución y que «revelan el impacto devastador que los abusos sexuales han tenido en su vida».
Según el informe, el 84% de las víctimas entrevistadas por la institución fueron hombres, como la gran mayoría de sus agresores. Solo una pequeña parte de los abusadores han sido juzgados por las autoridades civiles; la mayoría de ellos continuaron en sus puestos, fueron traslados y, en menor medida, juzgados por el Derecho canónico.
Así, el documento apunta que la respuesta de la Iglesia católica ante esos casos de pederastia, al menos a nivel oficial, ha estado caracterizada «durante mucho tiempo» por «la negación o la minimización del problema».
«Algunas víctimas han tenido que hacer frente no solo a la negación y a la ocultación, sino incluso a presiones y a reacciones de representantes de la misma en las que se les culpabilizaba de los abusos sufridos», ha censurado Gabilondo, quien ha calificado de «insuficiente y dilatoria» la respuesta de la Iglesia a las víctimas y ha criticado conductas habituales como el traslado de personas abusadora a otras parroquias, centros docentes o incluso países.
En cuanto a la participación de la Iglesia en esta investigación, Gabilondo ha explicado que se ha intentado contactar con todos los obispos, pero no todos han contestado. «Algún obispo nos ha reñido», ha dicho, pero también ha habido otros «que lo han hecho bien».
«Mentiría si dijera que aquí nadie ha colaborado y mentiría si dijera que ha habido una colaboración extraordinaria», ha indicado Gabilondo, para añadir que «la Iglesia ha tomado conciencia de que el mayor de los escándalos sería no colaborar con esta sociedad que quiere saber».
Medidas de reparación
Por otra parte, el informe del Defensor también critica que los poderes públicos carecieron de procedimientos adecuados para prevenir, detectar y reaccionar frente a la comisión de abusos sexuales de menores en los centros escolares de la Iglesia católica en el pasado y señala que, solo muy recientemente, en el año 2021, se introdujeron mecanismos y procedimientos de prevención y detección para la totalidad de los centros educativos de titularidad pública o privada.
Además, lamenta que la mayoría de casos que han llegado a ser denunciados no han encontrado respuesta por parte del sistema judicial.
El Informe propone una veintena de recomendaciones concretas. Entre ellas, se encuentran la de celebrar un acto público de reconocimiento y reparación simbólica a las víctimas por el prolongado período de tiempo de desatención y de inactividad, en particular entre 1970 y 2020, o la creación de un fondo estatal para el pago de compensaciones a favor de las víctimas de abusos.
«Me parece imprescindible que la Iglesia participe activamente y sea una parte fundamental del fondo estatal», ha dicho Gabilondo a este respecto y ha añadido que «la Iglesia, a estas alturas, debe ser consciente de esto».
Asamblea extraordinaria de obispos el lunes
La Conferencia Episcopal Española (CEE), que descartó participar en la comisión creada por el Defensor del Pueblo para investigar los casos de pederastia, ha decidido celebrar el próximo lunes una asamblea plenaria extraordinaria para estudiar el informe sobre los abusos sexuales, según ha informado esa institución poco antes de que Gabilondo entregara el informe a la presidenta del Congreso.