Piden que la desaparición de Ángel Echevarría hace 8 años no caiga en el olvido
Una concentración en Otxarkoaga ha pedido más esfuerzos en la investigación de la desaparición del joven Ángel Echevarría Cordón hace más de ocho años. Su familia ha recordado el trato «racista y clasista» recibido por la Ertzaintza en aquel momento. Hace poco se han hallado nuevas pistas.
Alrededor de un centenar de personas se ha concentrado esta tarde en la Plaza Kepa Enbeita de Otxarkoaga para exigir justicia, verdad y reparación para la familia de Ángel Echevarría Cordón, un joven que desapareció hace más de ocho años y del que todavía no se sabe prácticamente nada. Su familia ha perdido la esperanza de encontrarlo con vida, pero no quiere que el caso caiga en el olvido y piden que se pongan más esfuerzos en la investigación.
Fue el 10 de octubre de 2015 cuando despareció Ángel con 20 años, pelo y ojos marrones, 1,75 metros de altura y 65 kg de peso. Así ha relatado lo sucedido su propia hermana en la movilización de hoy: «Me dijo que iba a comer con un amigo en Portugalete, le di cinco euros para el Metro, le dije que tuviera cuidado... y no volvimos a verlo más».
Además, la familia ha denunciado el trato «racista y clasista» que recibieron por parte de la policía cuando fueron a dar parte de la desaparición: «Como no volvía a casa y siempre avisa, fuimos a comisaría y no nos hicieron caso. Nos llegaron a decir que estuviéramos tranquilas, que seguro que estaba gozando de fiesta. No creyeron que nuestro Ángel fuera una víctima cuya vida importase investigar. No nos creyeron cuando les dijimos que le habían hecho algo, que él no habría desaparecido así, sin llamar, sin decir nada, por propia voluntad».
Según han añadido, tuvieron que interponer la denuncia de desaparición hasta tres veces, «y para cuando el caso llegó por fin a la Unidad de Desaparecidos, dos semanas después, ya se habían borrado las imágenes de las cámaras del Metro».
«Se perdieron esas pruebas fundamentales porque la policía no nos hizo caso. Y creemos que no nos hizo caso porque somos personas gitanas y mercheras, del barrio de Otxarkoaga. Sentimos todo el peso del racismo y del clasismo en el momento más duro de nuestras vidas», han subrayado.
Avances recientes
Desde entonces, han luchado durante ocho años para que el caso siga abierto, poniendo carteles en la calle, denunciando el caso por las redes sociales e intentando recabar pruebas.
Pero el esfuerzo no ha sido en vano. La Ertzaintza acaba de abrir nuevas líneas de investigación después de, según adelantó ‘El Correo’, hallar una «pista fiable» sobre posibles «indicios de criminalidad» en la desaparición de Ángel, lo que podría llevar a que el caso no se archive en 2025, al cumplirse una década de la ausencia sin explicaciones de este bilbaino.
Para ello, han pedido el apoyo del barrio, de la ciudadanía, de las instituciones y de los medios de comunicación. «La esperanza de encontrarle con vida se ha ido disipando con los años. Pero lo que queremos es saber qué ha pasado para que los culpables respondan ante la ley. Nosotras necesitamos respuestas para cerrar esta etapa de tanta desesperación, agonía y sufrimiento», han añadido.