Hallan muerto a un hombre sin hogar en una plaza del barrio de Donibane de Iruñea

Un hombre sin hogar ha sido hallado muerto en la plaza monasterio de Azuelo, en el barrio iruindarra de Donibane. Una concentración en la plaza Consistorial ha recordado al fallecido, que, al parecer, ha muerto por «causas naturales».

Un hombre sin hogar ha sido hallado muerto en la plaza monasterio de Azuelo de Iruñea tras haber fallecido, al parecer, por «causas naturales». Una concentración en la plaza Consistorial le recordará a partir de las 18.00 horas.

El fallecido era una persona de mediana edad y su cuerpo fue localizado hacia las 2.00 horas del sábado. Agentes de la Policía Municipal acudieron al lugar, donde se encontraba el hombre en estado inconsciente.

Según añaden fuente del citado cuerpo, los policías le realizaron maniobras de reanimación, pero al llegar una ambulancia, el equipo sanitario certificó su fallecimiento.

El suceso se encuentra judicializado y es la Policía española la que se encarga de las diligencias.

Con motivo del fallecimiento de esta persona, el Sindicato de Vivienda de Iruñerria e Iruñerriko Kontseilu Sozialista se han concentrado este lunes en la Plaza Consistorial para protestar por este tipo de sucesos, que, denuncia, son consecuencia de «la sociedad capitalista».

«Denunciamos alto y claro que esto es una barbaridad, no solo por lo trágico del suceso, sino porque se trata de situaciones que se podrían evitar», ha afirmado este colectivo, que ha señalado que «el funcionamiento de este sistema en el que vivimos condena a miles de personas a la miseria, pese a que existen medios suficientes como para garantizar un bienestar universal».

En ese sentido, ha denunciado que «en la sociedad capitalista es inevitable que la gente siga muriendo en la calle, ya que no se puede garantizar una vivienda para todo el mundo mientras el acceso a las necesidades más básicas dependen del dinero y la posición social de cada cual».

Por ello, ha subrayado que «la única forma de acabar definitivamente con este tipo de sucesos es construir una sociedad comunista».

El pasado año, en concreto, el 17 de abril, otra persona sin hogar fue encontrada muerta, en este caso en el túnel del Plazaola de Iruñea. Se trataba de un hombre de 44 años y el cadáver fue encontrado por unos viandantes que pasaban por el lugar quienes, al percatarse de que había un cuerpo que no se movía, dieron aviso a la Policía Municipal. Como en el primer caso, se apuntó a causas naturales como motivo del fallecimiento.

Muerte no relacionada con la falta de recursos

La muerte de la persona sin hogar ha tenido lugar cuando desde el Ayuntamiento de Iruñea liderado por Joseba Asiron se está trabajando para evitar que haya personas que duerman en la calle. Al albergue habilitado en el antiguo convento de las Madres Apostólicas se ha sumado la opción de derivar a fondas a las personas que, en un momento dado, no consiguen plaza en el citado albergue.

En este sentido, el concejal delgado de Vivienda del Consistorio, Joxe Abaurrea, ha señalado que el Ayuntamiento trabaja «con prudencia» pero con «intensidad» con las personas sin hogar que duermen en la calle y ha apuntado que el caso del hombre fallecido en Donibane no está relacionado con la falta de recursos de acogida.

Tras destacar en conferencia de prensa que esta es una cuestión que «sigue siendo prioritaria» para el Consistorio, el concejal ha asegurado que este fallecimiento es «una desgracia que hay que lamentar profundamente» y ha mostrado su «cercanía y apoyo a todas las personas allegadas».

Este fallecimiento no se ha debido a la falta de recursos en los albergues municipales, sino a «otras circunstancias» personales, ha comentado Abaurrea, quien ha declarado que se trata de situaciones que «son delicadas» y con las que «hay que trabajar con mucha prudencia».

«Hemos hecho el mayor de los esfuerzos» para poner recursos de acogida a disposición de las personas que duermen en la calle, ha aseverado Abaurrea. Al respecto, ha considerado que «estamos en la buena dirección», ya que se ha podido dar alojamiento a «todo el que ha querido».

Abaurrea ha indicado que con los medios ordinarios no se llega a atender a todas estas personas, por lo que se utilizan otros recursos extraordinarios en estos momentos «más críticos» de frío en la ciudad.