Una variante feminista y libre de prejuicios de Frankenstein
POBRES CRIATURAS
Irlanda, 2023. 141'. Dir.: Yorgos Lanthimos. Guion: Tony McNamara, basado en la novela de Alasdair Gray. Prod.: Daniel Battsek, Ed Guiney, Ildiko Kemeny, Yorgos Lanthimos. Int.: Emma Stone, Willem Dafoe, Ramy Youssef, Jack Barton, Kathryn Hunter, Charlie Hiscock, Vicki Pepperdine.
La trayectoria del cineasta griego Yorgos Lanthimos ha sido muy peculiar. En 2009, ‘Canino’ lo encasilló como el sucesor de Haneke, un observador clínico e implacable de la esencia humana.
Las primeras incursiones americanas con ‘Langosta’ y ‘El sacrificio de un ciervo sagrado’ mantenían un cinismo casi misantrópico, aunque la crudeza se desvanecía gradualmente.
Lanthimos viró hacia la comedia con ‘La favorita’, cosechando múltiples nominaciones a los Óscar, y la explosión creativa le ha llegado ahora con ‘Pobres criaturas’: ganadora del León de Oro en Venecia y destacada en la temporada de premios estadounidenses con un Globo de Oro a mejor comedia y diversas nominaciones a los Óscar.
El sexo y sus matices culturales
La película es una adaptación coescrita con Tony McNamara, basada en la novela de Alasdair Gray de 1992 con una trama frankensteiniana. En ella, un peculiar doctor (Willem Dafoe) utiliza el cuerpo de una joven fallecida (Emma Stone) para albergar el cerebro de un feto, marcando el giro inicial de la trama. La mente de la nueva criatura, Bella Baxter, emprende un aprendizaje en un mundo que la codicia debido a su cuerpo adulto, enfrentándose a hombres que buscan controlarla.
El tema del sexo y sus matices culturales obsesiona a Lanthimos. ‘Langosta’ fue una alegoría incómoda sobre las relaciones de pareja, mientras ‘La favorita’ exploraba de manera festiva la dominación y sumisión. ‘Pobres criaturas’ amplifica la exploración sexual.
Bella Baxter irradia autonomía y libertad sexual, desafiando represiones sociales. Su deseo de descubrir el mundo se entrelaza con su disfrute. Un abogado (Mark Ruffalo) intenta explotarla, ofreciéndole un viaje desde Lisboa al Mediterráneo y finalmente París.
Sin embargo, es ella quien controla la situación, separando afectos tóxicos y ejerciendo incluso prostitución voluntaria.
Emma Stone, tras colaborar en ‘La favorita’, no solo actúa sino que también se involucró como productora tras leer el guion de esta fascinante propuesta.