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El Gobierno español autoriza la fusión de Orange y MásMóvil, dueña de Euskaltel

El Consejo de Ministros ha aprobado este martes la fusión entre Orange y MásMóvil, con la condición de implementar un plan industrial ambicioso a medio plazo y fuertes inversiones. Esta unión creará el principal operador en el Estado español, con más de 30 millones de clientes móviles.

Sede de MásMóvil, dueña de Euskaltel, en Madrid. (Eduardo PARRA | EUROPA PRESS)

El Consejo de Ministros ha aprobado este martes la fusión Orange-MásMóvil, una operación autorizada «con compromisos y condiciones específicas», entre ellas la de la puesta en marcha de un plan industrial «ambicioso» «a muy medio plazo» y que conllevará una política de inversiones «muy potentes».

MásMóvil, que nació en 1997 en Andoain para dar conexión a internet a pequeñas empresas, fue creciendo hasta implantarse en todo el Estado español, comprar Euskaltel, y ahora fusionarse con la francesa Orange.

El ministro español de Transformación Digital y Función Pública, José Luis Escrivá, ha anunciado este acuerdo del Consejo de Ministros en una rueda de prensa, en la que ha explicado que esta operación implicará la creación del «primer operador en España» con más de 30 millones de clientes móviles, 7 millones en banda ancha y 2 millones de televisión.

Con esta fusión, se constituirá una sociedad valorada en unos 18.600 millones de euros, que se postula a día de hoy como número uno en el mercado estatal de las telecos en cuanto a clientes, no así en facturación que seguirá siendo liderada por Telefónica.

Escrivá ha recordado que el sector de las telecos es «absolutamente estratégico», no solo por el número de ciudadanos al que afecta, sino porque el despliegue de infraestructuras digitales es de una «importancia estratégica máxima» y porque mantienen infraestructuras «críticas» para la seguridad nacional.

Un plan industrial «verdaderamente ambicioso»

En este contexto, ha apuntado que la fusión irá acompañada de un «plan industrial» de la entidad resultante, que es «verdaderamente ambicioso, con orientación de muy medio plazo y con una política de inversiones muy potentes en los próximos años en infraestructuras digitales fijas y móviles».

Además, esta autorización conlleva «unos compromisos específicos de gestión operativa de la red», ha precisado.

El ministro, que no ha detallado las «condiciones» de la fusión ni los «compromisos» adquiridos por ambos operadores, ha afirmado que, con esta fusión se ofrecerán mejores servicios a los ciudadanos y se velará por el despliegue de infraestructuras de fibra, 5G, 5G avanzado y 6G.

Ha asegurado que la competitividad de un país depende en una parte muy importante de sus infraestructuras digitales y conectividad, y que el Estado español está muy bien posicionado al respecto gracias al apoyo público obtenido.

Ha añadido que es necesario asegurarse de que esto seguirá así. También ha destacado la importancia de estas infraestructuras en el ámbito rural.

El grupo francés Orange y Lorca JVCO, propietario de MásMóvil, cerraron en julio de 2022 su acuerdo de fusión en el Estado español.

Por entonces, valoraron en 7.800 millones de euros a Orange y en 10.900 millones a MásMóvil, que había adquirido previamente a Euskaltel, según explicaron entonces ambas empresas en un comunicado conjunto.

Orange España y MásMóvil, segundo y cuarto operador del mercado del Estado, respectivamente, ya recibieron en febrero la autorización con condiciones por parte de la Comisión Europea (CE) para combinar sus operaciones en en el Estado español, más de un año después de que acordaran crear una empresa conjunta joint venture.

Con esta nueva sociedad, cuyo nombre no ha transcendido, se prevé crear una compañía con unos ingresos estimados de 7.400 millones de euros, un ebitdaal (ebitda después de arrendamientos) de más de 2.300 millones de euros y unas sinergias esperadas a partir de 2028 de más de 450 millones al año.

Como parte de las condiciones impuestas por Bruselas para dar el visto bueno a la fusión, Orange-MásMóvil tendrán que ceder a la operadora rumana Digi, 60 MHz (megahercios) de espectro (pendiente de aprobación por parte del Gobierno español) y un acuerdo opcional de roaming estatal.

La empresa resultante tendría forma de una joint venture al 50%, administrada conjuntamente por ambas con igualdad de derechos de gobernanza.