Acto en Mercedes para inaugurar la «gran transformación» que arrancó con las huelgas de 2022
Mercedes-Benz ha presentado la ampliación de la planta de Gasteiz, donde se fabricarán las furgonetas eléctricas VAN.EA. Las obras se anunciaron tras las huelgas de verano de 2022, que dieron pie a la firma del convenio y al cambio de la dirección. Marcaron el inicio de una «gran transformación».
Mercedes-Benz ha presentado este martes la ampliación de la factoría de Gasteiz, donde trabajan 5.000 personas. La multinacional alemana invertirá más de 1.000 millones de euros en la fábrica de la capital alavesa, que pasará de los 696.505 metros cuadrados actuales a cerca de 800.000 en 2026. Se levantarán nuevas naves de Montaje Bruto y Pintura y se ampliará el I-PARK y las instalaciones de Montaje Final para producir las furgonetas eléctricas VAN.EA.
Se trata de un hito en la historía de una planta que fabricó sus primeros vehículos en marzo de 1954, hace 70 años, y que aspira a alcanzar una producción neutra en carbono en 2039. Un objetivo en el que jugarán un papel clave los y las trabajadoras de las cadenas de montaje, los grandes ausentes en el acto institucional, celebrado en uno de los nuevos pabellones.
Allí han estado, entre otros, el responsable de la división de furgonetas de Mercedes-Benz, Mathias Geisen, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el lehendakari Iñigo Urkullu, que ha puesto en valor la colaboración público-privada.
También se ha referido a «las importantes dificultades que vivimos en 2015 y 2022, cuando se estaba decidiendo el futuro de Mercedes-Benz en Vitoria». «En esos momentos, gracias también al compromiso de las instituciones vascas, se tomaron importantes decisiones que garantizaron el arraigo de esta empresa», ha señalado sin citar las movilizaciones y las jornadas de huelga que dieron pie a la firma del nuevo convenio. Una lucha por los derechos laborales en los que las administraciones públicas no tuvieron un papel neutral.
Basta con recordar que el propio Urkullu reconoció que «nuestra apuesta es por la empresa». Y otros dirigentes jeltzales, como Ramiro González, echaron mano de la inversión prevista por Mercedes-Benz para condicionar las negociaciones: «Se juegan la consolidación de sus empleos».
Finalmente en julio de 2022 se alcanzó un acuerdo de convenio, ratificado por el 57% de la plantilla, y semanas después se anunció de forma oficial que Mercedes-Benz fabricará en Gasteiz las nuevas VAN.EA.
«Mérito exclusivo de la plantilla»
Así, no es de extrañar que este martes el presidente del comité, Igor Guevara, del sindicato ELA, haya subrayado el protagonismo de la plantilla en una «gran transformación» que arrancó hace tiempo.
«Hace décadas que la plantilla puso la primera piedra, y la segunda. Ha puesto muchas piedras para conseguir que la fábrica sea un referente dentro del grupo Mercedes», ha apuntado en declaraciones a ‘Boulevard’, de Radio Euskadi, donde ha advertido de que si en Alemania decidieron que el nuevo modelo se fabrique en Gasteiz «no fue por el mérito que algunos han querido otorgarse, sino por el mérito exclusivo de la plantilla que lleva décadas demostrando que no solo es un referente dentro del grupo, sino también en el sector de la automoción».
De cara a futuro, ha reconocido que el trabajo no será sencillo. «En veinte años hemos sido capaces de cambiar modelos. De adaptar las instalaciones y la tecnología, sin dejar de producir. Eso, con un vehículo complejo como el nuestro, es un logro. Ahora tenemos un reto por delante bastante mayor, mientras seguimos fabricando las variantes de la actual Vito y Clase V, que se han cambiado hace pocas semanas, se van a ampliar las instalaciones productivas de la fábrica, y se van a adaptar las que ya existen», ha añadido en referencia al VAN.EA, «un vehículo diseñado desde el inicio para ser eléctrico».
«Vamos a dar la vuelta a las instalaciones mientras seguimos fabricando los vehículos tradicionales de combustión con motores nuevos más eficientes y limpios, y a la vez vamos a fabricar otro vehículo totalmente diferente. No solo como producto, sino también en el proceso productivo», ha añadido, remarcando que es «tremendamente complicado».
No obstante, la situación ha cambiado en el seno de la factoría, con la llegada hace un año de un nuevo director que ha propiciado un giro de 180 grados en las relaciones laborales. «Se puede hablar con la dirección y buscar otro tipo de acuerdos. Se pueden llegar a acuerdos», ha señalado Guevara, que confía en contar con cien operarios más con contrato indefinido el año que viene. «Nos encontraremos con dificultades, pero gracias a la plantilla lo superaremos», ha manifestado.
LAB: «El futuro pasa por asegurar el empleo»
LAB, por su parte, ha advertido de que «el futuro de Mercedes en Gasteiz pasa por asegurar el empleo y las condiciones dignas de las personas que trabajan en ella».
En un comunicado, ha señalado que, «envuelta en plena precampaña electoral de la CAV, la planta de la firma alemana ha sido y es siempre escaparate para los diferentes cargos públicos, que han querido arrimarse a ella y sacarse la tan ansiada foto. Cómo no, todo ello regado de dinero público y con una presencia policial desmedida».
«En esta ocasión, hablamos de la concesión del PERTE por parte del Gobierno del Estado, lo cual supondrá la ampliación de la planta productiva a terrenos públicos gustosamente cedidos. Mientras que se entregan millones y millones de euros de las arcas a públicas a empresas privadas, ello no conlleva condición alguna hacia la plantilla. Ni mantenimiento del empleo, ni mejoras en las condiciones de trabajo de la plantilla. ¿Cómo puede ser?», ha preguntado.
Y ha aseverado que «en este momento que el capital ha apostado por lo que se ha denominado como movilidad verde, se nos avisa a la clase trabajadora de la pérdida de empleo y derechos que ello va a suponer. Por supuesto, para que sigan engrosando los bolsillos de los mismos de siempre, a costa de todos y todas las demás. Y Mercedes no va a ser una excepción. Habrá que luchar cada conquista, y la reivindicación del Marco Vasco de Relaciones Laborables sigue manteniendo la misma actualidad que hace tres décadas. Porque si aquí trabajamos, aquí decidimos. Tanto en Mercedes, como en Euskal Herria, la clase trabajadora no puede seguir pagando los excesos del capitalismo».
«Es por ello que ahora la propuesta de LAB del triple reparto cobra más importancia que nunca: reparto de la riqueza, del trabajo y de los cuidados. Cuando nos encontramos en plena transición, la única alternativa posible para poder seguir habitando el planeta pasa porque esta transición sea ecosocialista», ha añadido.