El getxoztarra ‘Jota’ Cuspinera sucede a Lolo Encinas en el banquillo de San Pablo Burgos

A pesar de que ocupa la tercera plaza de la Liga LEB Oro, a dos victorias del líder, Leyma Coruña, y de ganar a Cáceres por 109-102 en la última jornada, el técnico donostiarra ha sido cesado después de dar el salto a la capital castellana procedente de Gipuzkoa Basket.

No pocos entrenadores de baloncesto indican que firman por el equipo que sea pero que nunca deshacen las maletas, porque la falta de estabilidad de su profesión los puede obligar a salir de un día para otro de su puesto. Eso es exactamente lo que le ha pasado al técnico donostiarra del San Pablo Burgos Lolo Encinas, que pese a ocupar la tercera plaza de la Liga LEB Oro y tras ganar por 109-102 al Cáceres después de dos prórrogas en la pasada jornada, ha sido cesado de manera fulminante como jefe del banquillo burgalés.

Lolo Encinas llegaba al San Pablo Burgos procedente de Gipuzkoa Basket luego de estar a punto «chafarle» el ascenso a la Liga ACB el año pasado. La escuadra donostiarra llegaba lleno de ilusión a la Final Four de ascenso a la máxima categoría y se enfrentaba en semifinales a un rival con la «obligación», según su propia directiva, de regresar a la ACB un año después de descender.

Al final, ni donostiarras ni burgaleses, se coló de rondón el Palencia de Urko Otegi, pero al menos, San Pablo Burgos decidió llevarse a su equipo a Lolo Encinas, que antes de ejercer de primer entrenador en Gipuzkoa Basket, se había fogueado como primero en Iraurgi y como segundo en banquillos como el propio GBC a las órdenes de Pablo Laso, Sito Alonso o Jaume Ponsarnau, o el Bilbao Basket, como ayudante de Alex Mumbrú.

Según comenta la web de «Gigantes del Basket», la continuidad de Encinas a este último partido frente al Cáceres estuvo en solfa. «Ha sido la semana con más ruido. Se cuestionó mi continuidad en redes sociales y yo me enteré por unos amigos que me llamaron para preguntarme si me habían echado. Confío en la gente que me fichó y nadie me llamó. Incluso llamé a mi agente por si acaso y me dijo que no había nada», declaraba el entrenador donostiarra, que en febrero cumplía los 50 años, casi 30 de ellos metido en una labor u otra de la faceta técnica del basket.

Lo más raro es que San Pablo Burgos está tercero en la clasificación, a solo dos victorias del líder, Leyma Coruña, en una LEB Oro reñida como nunca en el que los ocho primeros están separados por cinco victorias después de 28 jornadas. El primer de la Fase Regular logra el ascenso directo y el resto, del segundo al noveno clasificado, disputan una ronda de play-offs de cuartos de final ante de pasar a la decisiva Final Four que otorga la segunda plaza de ascenso.

Es decir, en estos momentos el equipo que dirigía Lolo Encinas, que tiene un balance de 20-8, empatado en la tercera plaza con Gipuzkoa Basket –aunque con la paradoja de tener por delante a otro club de la misma ciudad por delante en la clasificación: el Grupo Tizona Burgos, con Diego Ocampo en su banquillo, segundo clasificado con un balance de 21-7–, entraría en los play-offs de cuartos de final con el factor pista a favor, debiendo vérselas con un grande venido a menos como es Estudiantes, sexto con 19 triunfos, pero al que San Pablo Burgos había vencido por 57-77 el reciente 3 de marzo, recuperándose de la derrota por 87-91 ante el equipo del Ramiro del pasado 30 de diciembre.

¡Si al menos hubiese encadenado una mala racha de resultados! De los diez últimos resultados, siete de ellos han traído victorias, incluyendo el mencionado ante Estudiantes o frente al Gipuzkoa Basket del donostiarra Mikel Odriozola, sustituto de Lolo Encinas en el banquillo de Illunbe.

«Llevo un tiempo sin redes sociales aunque antes era muy activo. Cuando recibes insultos y tal… nos intentamos aislar lo máximo. Me echarán por mi trabajo los que mandan, no las redes sociales», le ha revelado el propio Encinas a «Gigantes» en un ciclo demasiado corto y que no le ha dado al técnico donostiarra la oportunidad de enseñar su valor justo cuando el punto culminante de la temporada se estaba acercando.

Un gran ayudante

Y en estas llega el getxoztarra ‘Jota’ Cuspinera en sustitución de Lolo Encinas, en una papeleta en la que el vizcaino tiene más para perder que para ganar. Todo un estudioso del baloncesto y más que valorado como entrenador ayudante en banquillos como Saski Baskonia –a las órdenes de Ibon Navarro– o el Real Madrid –con Ettore Messina o Pablo Laso–, antes de llevar como primer entrenador distintos proyectos como Fuenlabrada, Zaragoza o Estudiantes, con resultados irregulares y recordadas ruedas de prensa en las que Cuspinera mostró cierta falta de control de su frustración.

Curiosamente, el técnico vizcaino estuvo por última vez al cargo de Estudiantes tras finalizar la temporada 2020/21 con el descenso a la LEB Oro. Fue destituido en abril de 2022, cuando los colegiales estaban segundos y con un balance muy similar al del San Pablo Burgos en este momento de la temporada: 21-7.

Carles Durán, cesado del Joventut

En la Liga ACB también ha caído Carles Durán. El preparador catalán, ex de Bilbao Basket durante año y medio hasta que fue cesado en la campaña 2016/17, había entrenado al club de su vida, el Joventut de Badalona, desde 2018, haciéndolo aposentarse entre los mejores de la competición doméstica y la Copa, alcanzando las semifinales de los dos torneos. Asimismo, había llegado a depositar muchas esperanzas de engordar su palmarés ganando la Eurocup, pudiendo además retornar a la Euroliga, pero el buen hacer de su equipo en la liguilla se tornaba impotencia en los duelos a vida o muerte.

Curiosamente, hace muy pocas fechas, luego de caer ante el UCAM Murcia de Sito Alonso por 75-82 el pasado sábado –gran amigo de Carles Durán, siendo ambos «alumnos aventajados» de Aíto García Reneses, en la época en la que la Penya, entre los años 2006 y 2008, ganó la FIBA Cup, la ULEB Cup y la Copa de Gasteiz, con la mejor versión de Rudy Fernández en su apogeo y la explosión de un imberbe Ricky Rubio; la famosa «R&R»–, el presidente del club verdinegro, el bilbaino Juanan Morales, se mostraba quejoso y crítico con la campaña de su equipo. Se mostraba quejoso porque los resultados no estaba siendo acordes «al esfuerzo económico» realizado y dejaba entrever cierta «falta de química» entre lo que ofrecía la plantilla y lo que proponía el cuerpo técnico. «¿Significa eso que hay que echar a todo el cuerpo técnico y a toda la plantilla? No», se dijo el presidente Morales, pero poco después llegaba la noticia del cese de Carles Durán, que encadena cinco derrotas y no gana desde el 2 de marzo, lo cual lo ha descabalgado de los puestos de play-off al punto de estar en décima plaza con 14 triunfos, incrustado entre Saski Baskonia –noveno con 15– y Bilbao Basket –undécimo con 13–.

La entidad badalonesa considera que la decisión de prescindir de Durán, con contrato hasta junio 2025, es «lo mejor para el futuro del equipo». Estas seis temporadas como técnico del primer equipo, ha hecho debutar a un total de 13 canteranos, entre ellos al getxoztarra Xabi López-Arostegi, y ha pasado de liderar aun Joventut prácticamente descendido y económicamente cerca de la desaparición, a pelear cerca de lo más alto a nivel ACB y la Eurocup, superando, sin ir más lejos, a Saski Baskonia en los cuartos de final de la Copa y los play-offs ACb del año pasado.