La Asamblea General de Laboral Kutxa aprueba las cuentas de «un ejercicio extraordinario»
La Asamblea General de Laboral Kutxa ha aprobado por unanimidad las cuentas de la entidad del ejercicio 2023, calificado como «extraordinario». Los resultados obtenidos constituyen un «techo histórico», lo que «permite «abordar los programas estratégicos previstos para afrontar los retos de futuro».
Laboral Kutxa ha celebrado su Asamblea General Ordinaria en el auditorio principal del Palacio Kursaal de Donostia. Los socios y las socias de la cooperativa de crédito han aprobado por unanimidad las cuentas anuales y la gestión correspondientes al pasado ejercicio 2023, así como el resto de los puntos dispuestos en el orden del día. Asimismo, las personas socias presentes y quienes han seguido la cita por streaming han tenido la oportunidad de conocer el plan de gestión para el presente ejercicio 2024 y los principales elementos que determinarán la ruta estratégica establecida por Laboral Kutxa para los próximos años.
En su primera asamblea como presidente de Laboral Kutxa, Adolfo Plaza se ha dirigido a los asistentes y ha calificado el ejercicio 2023 como «extraordinario». Los resultados obtenidos constituyen un «techo histórico» para la entidad, lo que permitirá «abordar los programas estratégicos previstos para afrontar los retos de futuro». El beneficio obtenido ha sido de 222 millones de euros.
65 años desde la fundación
Plaza ha recordado que en 2024 se cumplen 65 años desde la fundación de Laboral Kutxa, y se ha mostrado orgulloso de que, en todo este tiempo, «la entidad ha demostrado su capacidad de adaptación a escenarios muy diversos, superando crisis financieras mundiales y momentos de inestabilidad». Ha recordado que en 2009 operaban casi 200 entidades en el Estado español y que hoy día tan sólo 93 de ellas mantienen su actividad. No obstante, el presidente de la entidad ha destacado que «el mérito de Laboral Kutxa no es permanecer sino gozar de una salud envidiable y estar en mejor forma que
nunca».
En un tono más severo, el presidente de la cooperativa de crédito de Mondragon ha querido compartir su preocupación por «los riesgos globales que amenazan el futuro y que incidirán directamente en la estrategia de la entidad». «Los riesgos geopolíticos, la inflación, el cibercrimen o el riesgo asociado a los eventos climáticos constituyen elementos que pueden alterar la buena marcha de muchos negocios y también la actividad de las entidades financieras», ha señalado. Como ejemplo cercano que pone de manifiesto el cambio climático, Plaza ha hecho alusión a la influencia en el negocio asegurador que tuvieron las fuertes precipitaciones en forma de granizo que se produjeron durante el pasado año y que, a su vez, «sirvieron como prueba de la excelente capacidad de respuesta de Seguros Lagun Aro».
Reto demográfico
Para terminar la primera parte de su alocución, el presidente de Laboral Kutxa se ha referido con preocupación al reto demográfico. Los datos, según ha afirmado, son «abrumadores». Así, en la Europa de 2050, el porcentaje de personas con más de 65 años supondrá el 30% de la población (hoy es el 20%), y la cifra media de los hijos e hijas actuales apenas llega a 1,5, cuando la cifra necesaria para mantener la población se estima en 2,1. Los datos para el entorno de Laborla Kutxa son «igualmente preocupantes», y este «cambio de paradigma» evidencia la necesidad de adoptar «cambios profundos en todos los órdenes sociales y económicos».
En su intervención ante la asamblea, el director general de Laboral Kutxa ha repasado los principales apartados de la Memoria 2023. Xabier Egibar ha comenzado explicando el contexto macro y bancario del pasado ejercicio. Como resultado de la subida de los tipos de interés por parte de los bancos centrales, se abrió una «ventana de rentabilidad» para el sector, consecuencia del «gap [diferencia] entre los ingresos del activo y el control de los costes de pasivo».
«Rentabilidades históricas»
El escenario bancario de 2023 combina el descenso de volúmenes de negocio con «unas rentabilidades históricas». El grupo Laboral Kutxa, resultante de la integración contable de las empresas participadas (compañías de seguros, gestoras de fondos e inmobiliarias), ha consolidado un beneficio de 222,7 millones de euros, lo que implica un incremento del 48% con respecto al año precedente. La rentabilidad sobre los fondos propios (ROE) se ha elevado hasta el 10,78%. A modo de valoración, Egibar ha destacado que «en términos de resultados, presentamos un ejercicio de récord».
Respecto a los aspectos más relevantes de la actividad comercial desarrollada durante el pasado año, el directivo ha comenzado explicando que 2023 ha sido «un año de importantes logros en el desarrollo del negocio». Así, en el apartado del ahorro, donde los recursos intermediados por la cooperativa crecieron un 2,7%, Egibar ha puesto el acento en que Laboral Kutxa fue una de las primeras entidades en implantar la remuneración de las figuras a plazo fijo. Y, en paralelo, también ha señalado el óptimo comportamiento de los saldos fuera de balance, lo que, en términos de captación de nuevos saldos en el año, ha elevado a la gestora de fondos de inversión a la sexta posición en el ranking estatal de Inverco.
Positiva evolución de la inversión crediticia
Por lo que se refiere a la inversión crediticia, a pesar de ceder un 1,31% por el incremento de las amortizaciones, la evolución fue sensiblemente más positiva en comparación con el mercado. Egibar ha destacado el comportamiento de las formalizaciones hipotecarias, que superaron las previsiones en un entorno competitivo de «alta agresividad en precios de la nueva producción». A su vez, los préstamos personales también han experimentado avances superiores a la media del sistema. Por su parte, el negocio de empresas acusó una notable caída de la demanda en la segunda parte del ejercicio 2023, lo que, junto al incremento de las amortizaciones anticipadas, se tradujo en un descenso de la cartera en el sector. Pese a todo, Laboral Kutxa continuó con su orientación de crecimiento en la red especializada, que «siguió experimentando una evolución muy positiva».
Para terminar con el repaso de la cartera crediticia, Egibar ha valorado positivamente que la ratio de dudosidad se mantuviera contenida en el 2,7%, «en unos parámetros muy razonables. La comparativa con el sector sigue siendo satisfactoria, incluso sin haber realizado depuraciones de cartera recurriendo a la venta de activos».
Planes para 2024
En palabra de Egibar, «2024 seguirá dentro del ciclo positivo de rentabilidad». La entidad mantendrá su política de «equilibrar la rentabilidad a corto plazo, aflorando ratios competitivos con respecto al sector, con el largo plazo, reforzando los fondos de provisión y, sobre todo, incidiendo en estrategias que consoliden la rentabilidad futura de la entidad». Las líneas de actuación y las proyecciones cuantitativas se orientarán a lograr los grandes objetivos plasmados en la doble agenda estratégica, que implica competir en el presente y transformarse de cara al futuro.
Con estas premisas, para competir en este 2024 en la gestión del ahorro y la inversión, la entidad pretende seguir con su «singular política de remuneración del pasivo» que inició a mediados del pasado ejercicio, en combinación con su propuesta de diversificación mediante los fondos de inversión. Asimismo, Laboral Kutxa pretende seguir expandiendo su negocio con las empresas, con el claro objetivo de aumentar el volumen de la cartera crediticia y el número de clientes. Según ha explicado Egibar, durante los últimos ejercicios se ha avanzado de manera notable, con incrementos de cuota sostenidos en las empresas medianas y grandes; y el objetivo para el presente ejercicio es acompañar ese crecimiento con una mayor actividad en los segmentos de empresas de menor dimensión.
En el ámbito hipotecario, por su parte, el reto se ha establecido en mantener la cuota alcanzada en 2023 y «asentar el modelo de captación en los territorios de expansión», Madrid y Barcelona, principalmente.
En lo relativo al negocio de seguros, caracterizado por un comportamiento cíclico diferente al financiero, la entidad seguirá aprovechando las oportunidades de crecimiento en nueva producción y nuevos clientes, apoyada en la actual coyuntura de mejora del margen de intereses del negocio bancario.
Respecto al objetivo transformador reflejado en la segunda parte de la agenda estratégica de Laboral Kutxa, el enfoque se fundamentará en desarrollar las capacidades necesarias para ser competitivos en un futuro cada vez más digital y complejo. Así, se prevé continuar con la «importante estrategia inversora en la red comercial», de forma que el modelo de oficina «se identifique como un espacio multicanal en el que se despliegue con los clientes un modelo de relación cercana e híbrida, presencial y digital, y ello sin olvidar la aplicación de metodologías ágiles y dinámicas para simplificar los procesos comerciales y descargar a las oficinas de carga operativa».
Egibar visualiza una entidad mucho más tecnológica, para lo que considera necesario intensificar el esfuerzo inversor en este ámbito y reforzar las estructuras del área de Tecnología y Analytics. Unido a ello, también estima «prioritario» seguir reforzando el control sobre los riesgos tecnológicos y de ciberseguridad, manteniendo los ritmos establecidos en los cuatro grandes ámbitos de actuación definidos: gobernanza,
vigilancia, protección y resiliencia.