Ollo subraya que la derogación de la Ley de Secretos Oficiales contribuiría a la «regeneración»
Derogar la Ley de Secretos Oficiales sería una buena manera de avanzar en la «regeneración democrática», según ha destacado la vicelehendakari navarra Ana Ollo, que ha recordado que es una reivindicación de las víctimas de violencia policial reconocidas por el Gobierno navarro.
La derogación de la Ley de Secretos Oficiales sería una buena medida para avanzar en la «regeneración democrática» que se reclama desde el Gobierno español el periodo de reflexión de Pedro Sánchez, según ha destacado la vicelehendakari navarra Ana Ollo en el Parlamento al responder una pregunta de Pablo Azcona (Geroa Bai).
Ollo ha recordado que esta ley data de 1968 y fue firmada por el propio dictador Francisco Franco y que en los encuentros que han mantenido con las familias de las doce víctimas de violencia policial reconocidas por el Gobierno navarro les han manifestado que la Ley de Secretos Oficiales es una dificultad a la hora de obtener verdad y justicia.
«Es una ley que no está homologada a la Constitución, que data de 1968 y que responde a la lógica de un régimen dictatorial», ha destacado Ollo, que ha explicado que esta norma no establece un límite temporal para la desclasificación de documentos y que esta potestad corresponde al Consejo de Ministros y a la Junta de Jefes de Estado Mayor, la cúpula militar del Estado.
Por ello, ha defendido que sería conveniente «sacar del ordenamiento esta norma preconstitucional».
En este sentido, ha subrayado que la derogación de esta ley arrojaría luz sobre las muertes de Montejurra (hoy se cumplen 48 años de esos hechos), los Sanfermines de 1978 o la muerte de Mikel Zabalza.
La vicelehendakari ha recordado que se trata de una competencia estatal y que ya ha habido algunos intentos para la derogación, con la oposición de la derecha y la ultraderecha. En cualquier caso, apenas se ha avanzado en esta línea en Madrid.
También el Parlamento navarro aprobó una moción al respecto la pasada legislatura, con la oposición de Navarra Suma, y colectivos como Amnistía Internacional han denunciado que esta ley da carta blanca para proteger la vulneración de derechos humanos. Numerosos colectivos se han manifestado en este mismo sentido.