VW confirma a Chivite que sacará dos nuevos eléctricos fabricados en Nafarroa en 2026
La lehendakari de Nafarroa, María Chivite, asegura en el Parlamento que está en una situación de «tranquilidad vigilante» con respecto a Volkswagen. Afirma que la dirección le ha corroborado su plan de sacar dos urban eléctricos (un Skoda y un VW) que se sumarán a los dos modelos de combustión.
«Los planes siguen como lo previsto», ha sostenido Chivite en su comparecencia parlamentaria este martes sobre la situación de VW. «Las noticias son muy malas a nivel de Alemania, pero son cuestiones que no afectan a los planes Península Ibérica», ha insistido.
La lehendakari ha trasladado al Parlamento sus últimas conversaciones con la dirección de la transnacional del automóvil. «Las medidas de recorte de personal, salarios y fábricas se circunscriben, estrictamente, a Alemania», ha asegurado.
Sin embargo, la confianza no es plena. «Estamos en una situación de tranquilidad vigilante», ha sostenido. Tampoco el comité de empresa muestra una confianza plena.
Los planes que VW mantiene para Nafarroa es comercializar en 2026 dos nuevos modelos urban, uno bajo la marca Skoda y otro ya con las siglas emblema, el Volkswagen ID.2X (que se parece a una versión electrificada del Polo).
Este ID.2 para Chivite será «un punto de inflexión para la compañía» dado que será el eléctrico «que la gente va a poder comprar, porque saldrá en torno a los 20.000 y los 25.000 euros».
En este sentido, la fábrica ha avanzado en tiempo y forma en dos de las infraestructuras clave para su adaptación a estos dos nuevos modelos, como son la nueva nave de chapistería y la nueva prensa PXL, que ha costado más de cinco millones.
Una tercera pata es la fábrica de baterías, que Chivite ha destacado por ir más avanzada que lo previsto y que «ya se ve» cuando se atraviesa el polígono en coche, por lo que el Gobierno trabaja en una «agilización» de plazos.
Al mismo tiempo, la fábrica de Landaben mantiene la producción de los dos modelos con motor de combustión que se fabrican actualmente: el T-Cross y el Taigo, que según la presidenta están vendiéndose mejor de lo esperado.
De otra parte, la lehendakari ha asegurado que su Gobierno trabaja en crear un «ecosistema que acompañe» a la transición hacia el modelo eléctrico. Para ello, ha asegurado que la nueva ley de industria supondrá una gran herramienta.
Según Chivite, el 17% de los vehículos que se venden en Nafarroa ya están electrificados.
Al mismo tiempo, se ha comprometido «a impulsar la movilidad sostenible y una agenda específica de movilidad eléctrica». Según sus datos, un 17% de los vehículos que se venden en Nafarroa ya están electrificados.
En cuanto a la red de puntos de recarga, Chivite ha asegurado que hay ya más de 300 puntos de recarga, que es una cifra récord en el Estado, llegando a los 12.250 euros.
También, según la lehendakari, las ayudas que Nafarroa gracias a su autonomía fiscal son las más altas del Estado para la compra de vehículos, furgoneta y pequeños camiones.
El mantra de Martorell y la preocupación consciente de EH Bildu
Por parte de UPN, Javier Esparza siguió con su discurso de que la planta de Nafarroa ha perdido peso específico y que rivaliza con la de Martorell, que es más grande. Según Esparza, el Gobierno español apuesta claramente por la fábrica catalana.
Quien más ha profundizado en la situación ha sido la cabeza de lista de EH Bildu, Laura Aznal, pues es economista y trabajadora de Volkswagen en excedencia.
Ha aclarado que VW todavía no ha cerrado plantas en Alemania y que el motivo que ha alegado la compañía y su filial Porsche para abandonar su proyecto de construir allí coches eléctricos es que los costes de la energía en ese país son demasiado altos, así como los salarios.
Aznal ha detallado que VW repartió el año pasado 4.500 millones en dividendos y que este año registra un superávit de 1.500.
No obstante, ha explicado que esto no obsta para que la crisis sea real y que sea una evidencia que la transformación hacia modelos eléctricos va a provocar una pérdida de empleos en el sector del automóvil.
Aznal ha asegurado también que esto provocará la apertura de nuevos nichos de empleo que hay que saber aprovechar.
Al igual que UPN, Aznal se ha mostrado preocupada por lo que la planta de baterías finalmente no esté dentro de la fábrica, lo que amenaza con hacerle perder competitividad con respecto a otros grupos.