Trabajadores de la empresa Huyck Wangner, más conocida como Perot, han ofrecido una rueda de prensa donde han informado de que la dirección de la compañía quiere despedir a 75 de los 81 operarios.
Según han señalado los trabajadores, las razones en las basaron su decisión fueron don: por un lado, la crisi que está pedeciendo el sector en general, y por otro lado, que la maquinaria de la planta de Zizurkil «está obsoleta».
Ante estas razones, los operarios han dejado claro que la planta de Zizurkil ha dado beneficios todos los ejercicios y que, además, es la que mayor productividad total tiene. Han añadido que los salarios de los trabajadores «no es un problema».
Creen que la decisión de despedir a tantos trabajadores «es puramente estratégica», y que lo único que buscan «es incrementar aún más los beneficios».
Ante esta situación, han decidido comenzar una huelga general indefinida y van a emprender acciones judiciales, ya que la medida les parece «desproporcionada». Han señalado que intentarán buscar la implicación de las instituciones públicas a la hora de negociar con la dirección.
La dirección justifica los despidos
La dirección de la empresa ha justificado mediante un comunicado los despidos, y ha argumentado que son «necesarios parala viabilidad» de la misma.
La empresa ha explicado que, tras realizar «un detallado análisis tanto interno como externo», ha constatado que «existen causas objetivas de carácter económico, productivas y organizativas para iniciar este proceso de acuerdo a la legislación vigente».
Por ello, y «ante la inviabilidad de mantener en activo la instalación fabril de Zizurkil», la compañía ha decidido proceder a la amortización de 75 puestos de trabajo.