El pacto interno entre los dos sectores de UPN liderados por Yolanda Barcina, la actual presidenta, y Alberto Catalán, presidente del Parlamento, ha saltado definitivamente por los aires. Tras las tensiones advertidas en los últimos días y confirmadas por ambos, Catalán ha confirmado en declaraciones al canal local Navarra Televisión que está dispuesto a competir por liderar el partido en el congreso previsto para el 17 de marzo

Ambos dirigentes habían alcanzado un pacto de mínimos hace tres semanas consistente en que Barcina ostentaría la Presidencia y Catalán pasaría a ser vicepresidente, pero con nuevas competencias y funciones que lo convertirían en el lider «de facto». Posteriormente, la lectura de este acuerdo ha enfrentado a ambos. Barcina se ha corregido a sí misma para exponer que no está dispuesta a integrar una bicefalia, y Catalán considera que eso supone la ruptura del pacto y ha optado por presentar su candidatura.

Según recoge el periodista Roberto Cámara en su cuenta de Twitter, Catalán ha afirmado que «la falta de conformidad y dilación injustificada, no por mi parte, ha impedido la materialización de ese acuerdo».

Y añade: «UPN debería estar más vivo y fuerte que nunca. He decidido presentar mi candidatura para presidir nuestro partido».

Todo ello aboca al partido a un fuerte enfrentamiento interno. La decisión de Catalán puede haberse acelerado también tras la decisión de la jueza de Iruñea de emprender una investigación a fondo sobre la gestión en Caja Navarra, que aunque no tiene a Yolanda Barcina como destinataria –al ser aforada su caso lo tramitaría el Supremo–, sí deja a la actual presidenta en situación muy delicada de cara al futuro.

A través de una carta

Catalán ha remitido una carta a algunos afiliados de su partido en la que explica las razones por las que ha decidido dar este paso.

Según informa Efe citando fuentes de su entorno, en la carta Catalán señala que después de «meditarlo mucho» ha decidido presentar su candidatura, al no poder cerrar el acuerdo con Barcina, quien esta semana había adelantado que no había novedades sobre el Congreso.

«Hubo un acuerdo para llegar al congreso con una lista conjunta pero se frenó y no ha habido manera de consumarlo», resalta.

La carta no ha llegado a todos los afiliados sino a aquellos, según dice en la misiva, «cuyos correos y teléfonos se encuentran entre mis contactos para haceros partícipes de este compromiso».