Antes del sábado 6 de julio el Ministerio español de Industria debe enviar a Nuclenor la documentación del cese de explotación de la central nuclear de Santa María de Garoña y, según ha informado la empresa que gestiona la planta a los trabajadores, todavía desconocen si estará condicionado o no a alguna circunstancia.
Alberto César González ha explicado a Efe que, en todo caso, la empresa les ha presentado un plan de trabajo en el que a partir del próximo lunes, de forma «provisional», funcionarán con el «doble escenario» de cese de explotación pero manteniendo la «reversibilidad del proceso».
El presidente del comité de empresa ha señalado que esta «puerta abierta» a la continuidad de Garoña se basa en el Ministerio dejó claro que el cese era por motivos económicos y no de seguridad, lo que permitiría poder retomar la actividad de la instalación.
González ha añadido que, según la empresa, este periodo transitorio puede durar «días, semanas o meses» y durante este tiempo están garantizados «todos los puestos de trabajo».
En este sentido, el trabajo en la central «no sufrirá grandes cambios», puesto que Garoña está parada desde diciembre de 2012 y se trata de mantener esta situación garantizando la seguridad de la planta y, especialmente, la conservación del combustible en la piscina.
El presidente del comité de empresa ha señalado que, tras estas noticias, mantienen la esperanza de que Garoña pueda seguir funcionando más allá del próximo sábado y confían en que los responsables de Gobierno español y de Nuclenor lleguen a un acuerdo en este sentido.