La sesión, que ha arrancado con cerca de una hora de retraso en la Audiencia Nacional española, se ha iniciado con la exposición de las conclusiones de la Fiscalía, que mantiene las peticiones de cárcel para todos los encausados. 

En primer lugar, ha comenzado a detallar, en base a los informes de la Guardia Civil, cuáles son las acusaciones contra cada uno de los jóvenes.

El Ministerio Público ha admitido que las declaraciones en sede policial no constituyen una prueba en sí mismas y ha añadido que, por ello, las acusaciones se construyen con elementos complementarios como los seguimientos policiales o los objetos incautados.

Además, ha citado en varios casos la denuncia de torturas y ha recordado que no le constan actuaciones derivadas de las mismas. Precisamente, se ha basado en testimonios obtenidos durante la incomunicación, tanto autoinculpaciones como inculpaciones a terceros, para construir su acusación.

En los casos de Ainara Bakedano, Ion Telleria y Gaizka Likona, se les acusa de ser dinamizadores de la actividad pública de Gazte Independentistak y organizar actos que podrían responder a los intereses de Segi.

También han detallado las acusaciones contra Ion Anda, Jon Ziriza y Olatz Izagirre.

Antes del receso, se ha anunciado un cambio en el calendario, por el que se ha suspendido la sesión de mañana por la tarde. Por tanto, habrá sesiones el jueves y el viernes por la mañana, lo que podría provocar que el juicio no termine el viernes, como estaba previsto.

La segunda parte de la sesión ha comenzado con las conclusiones extraidas de los informes de la Policía española.

El juicio, que comenzó en octubre, quedará visto para sentencia una vez presenten sus conclusiones la Fiscalía, Dignidad y Justicia y la defensa. También los encausados tendrán opción de hacer su último alegato.