Iñaki Azkuna se ha referido a la petición realizada al Gobierno municipal de Bilbo por parte de EH Bildu para retirar los retratos de los alcaldes de la época del franquismo colocados en la casa Consistorial.
Azkuna ha argumentado que los «cinco o seis» retratos de los alcaldes franquistas conviven con los que representan a personalidades «desde 1300», con alcaldes de todas las épocas. Asimismo, ha destacado que, entre esas imágenes, se encuentran la del «señor Ibarra, asesinado por ETA, la de la alcaldesa Pilar Careaga, la única que ha tenido Bilbao».
«Y ahora se rasgan las vestiduras estos, que no han hecho más que enseñarnos cuadros durante 40 años en manifestaciones, cuadros muchas veces de asesinos. 40 años enseñándonos los cuadros y vociferando en la calle», ha criticado el alcalde jeltzale, para añadir que «estos ahora no nos van a dar clases de democracia» cuando «mis espaldas han sufrido algún porrazo y alguna estancia en la comisarí» durante el franquismo.
Azkuna ha insistido en que los cuadros de los regidores franquistas están «mezclados con los monárquicos, los de la restauración, los de la democracia y los de la República, porque Bilbao es una mezcla social y política».
En este sentido, ha apostado por «tener respeto a todo el mundo que piensa política de diferente manera aquí» ya que, en caso contrario, «estaríamos buenos, utilizaríamos la pistola para liquidar a los anteriores y, cuando lleguen otros, nos liquidarían a nosotros».
Azkuna ha defendido que, «en quince años de alcalde», no ha cambiado «ni un nombre» a ninguna calle, sino que solo ha puesto «nuevos», a los que desea añadir «alguno como el de Frank Gehry en el nuevo puente que se va a hacer en el canal de Deusto».
Respeto «a los de derechas y a los de izquierda»
«No he quitado nada porque hay que respetar la Historia y, aunque nos moleste y no tenga las mimas convicciones que los alcaldes franquistas que están pintados en el Ayuntamiento, no soy nadie para quitarlos», ha afirmado.
Ha dicho que «si algún día un juez dice que lo quitemos, lo quitaremos», pero «antes no». Por tanto, ha instado a EH Bildu a que «vaya al juzgado si quiere» porque «yo no voy a quitar ni un cuadro».
«No quito nada porque no es mío y tengo que tener el suficiente respeto a todo el mundo de Bilbao, a los de derechas y a los de izquierda», ha concluido.