La jueza argentina María Servini de Cubría ha llegado sobre las 10.00 a los juzgados de Gernika para tomar declaración a Julen y Elisa Kalzada, hijos de un fusilado por las tropas franquistas en Busturia en 1937. Julen Kalzada es sacerdote, estuvo preso en Zamora y fue juzgado en el Proceso de Burgos.

En una entrevista concedida a Euskadi Irratia antes de acudir a Gernika, Elisa Kalzada ha asegurado que «aquellos años fueron durísimos, en nuestra casa, por lo menos, o en el pueblo, mejor dicho», en alusión a Busturia, «porque, de la noche a la mañana, fueron seis fusilados y quedaron seis viudas y 17 huérfanos».

Su hermano Julen ha afirmado que ahora «está alegre» porque, «aunque no sea tanto como el de Nuremberg, hay que hacer todo lo posible para que el franquismo sea condenado o, por lo menos, juzgado, como el nazismo».

La jueza ha escuchado sus testimonios durante dos horas y media aproximadamente y a la conclusión ha tenido unas breves palabras para los medios de comunicación. Tras indicar que la toma de declaración ha ido «muy bien», ha añadido que no quería hacer más declaraciones «porque quiero mantener el secreto de sumario para no tener después problemas».

Ha aludido a la apretada agenda que ha tenido durante su visita a Euskal Herria, aunque considera que ha sido «fructífera», y se ha mostrado «especialmente satisfecha» por la labor que ha realizado durante la jornada de hoy, al poder tomar declaración a los hijos de un fusilado por las tropas franquistas. «Nos ha muy bien hoy. Hemos podido tomar declaración, excepcional», ha afirmado.

La titular del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal número 1 de Buenos Aires se encarga de la investigación por crímenes de genocidio y de lesa humanidad cometidos por el régimen franquista desde el 18 de julio de 1936 hasta el 17 de junio de 1977, fecha de las primeras elecciones tras la dictadura.

Tras tomar declaración en Gernika a Julen y Elisa Kalzada, la jueza ha sido recibida por el alcalde de la localidad, José María Gorroño.

Donostia

Ya al mediodía, tenía previsto desplazarse a Donostia, donde mantendrá un encuentro con el alcalde de la capital guipuzcoana, Juan Karlos Izagirre, según ha informado la Plataforma Vasca contra los Crímenes del Franquismo.

Posteriormente, por la tarde, María Servini de Cubría comparecerá ante los medios de comunicación en el Consistorio donostiarra. La cita podría ser sobre las cinco o seis de la tarde, pero se ajustará en base a la agenda de la magistrada.

Además, este pasado lunes, la magistrada se desplazó al hospital de Miranda de Ebro, en Burgos, donde se encuentra ingresado el bilbaino Félix Padín, miliciano anarquista, que estuvo en varios campos de concentración, pero no pudo tomarle declaración al no haber llegado su exhorto a los juzgados. No obstante, sí conversó con él y le vio «muy lúcido». Padín se encuentra ingresado en el centro hospitalario tras sufrir una hemorragia interna y enviará a la magistrada una declaración por escrito.