Bilbo ha sido testigo de una multitudinaria manifestación contra la privatización de Kutxabank. La movilización ha resultado masiva, con la participación de cerca de 5.000 personas, según los datos ofrecidos por los convocantes.
Convocada por los sindicatos ELA y LAB junto con otras organizaciones sindicales y sociales, la manifestación ha partido pasadas las 17.30 del Sagrado Corazón y ha recorrido la Gran Vía bilbaina en dirección al Arenal.
La marcha ha discurrido entre gritos en contra de la privatización de las cajas integradas en Kutxabank -BBK, Vital, Kutxa- tras una pancarta en la que se leía ‘Euskal Herrian sistema finantziero publikoa. Kutxabaken pribatizaziorik ez!’.
Los secretarios generales de ELA y LAB, Adolfo Muñoz y Ainhoa Etxaide, respectivamente portaban, entre otros, la pancarta de cabecera.
Entre los participantes en la marcha, se encontraban los representantes de EH Bildu Joseba Permach, Pello Urizar y Oskar Matute, entre otros.
En declaraciones previas a los periodistas, el secretario general de ELA ha insistido en denunciar que los responsables del proceso de transformación de las cajas en fundaciones bancarias «están ocultando» que el paso siguiente es «la privatización» de Kutxabank, dejando «en manos del capital privado la mayoría de una patrimonio que tiene 150 años de control público».
Muñoz ha criticado que el PNV, el PP y el PSE «han acordado el proceso completo», que, a su juicio, supone «un saqueo en toda regla».
El dirigente sindical ha vuelto a censurar que en la convocatoria de la asamblea de BBK del próximo 30 de junio se plantee a los participantes que «solo pueden votar sí» a la transformación de la caja en fundación, lo que, en su opinión, «es propio del fascismo».
El responsable del sindicato ha reiterado que ELA y LAB estudian presentar una denuncia en los juzgados si no se retira de la asamblea de BBK el punto del orden del día en el que se trata el asunto citado.
«No es lo que necesita el país»
Por su parte, la secretaria general de LAB, Ainhoa Etxaide, ha denunciado que el PNV «quiere regalar a los especulares la capacidad de situar el ahorro al servicio del sistema productivo vasco» y ha exigido a dicho partido que paralice el proceso de conversión de las cajas en fundaciones.
Ha considerado que dicho proceso «no es lo que necesita el país» y ha puesto de manifiesto que, según lo establecido en la Ley de Cajas y Fundaciones Bancarias, se tiene de plazo hasta final de año para «construir otro tipo de salida».
La manifestación llega un día después de que Kutxa celebrara su Asamblea General en Donostia, un encuentro al que los medios de comunicación no tuvieron acceso por decisión de su presidente, Xabier Iturbe, y donde se vivieron momentos de tensión con la Ertzaintza, que impidió el acceso a los miembros de EH Bildu al no ser reconocidos, confundiéndolos con los manifestantes de las protestas.