«Actuaremos en dos direcciones: primero, presentaremos un cargo en el tribunal en Luxemburgo (...) segundo, no aplicaremos (la decisión) de los ministros del Interior», ha precisado Fico ante la prensa.
Los ministros de Interior de la UE lograron este martes un acuerdo «por aplastante mayoría» para reubicar en un plazo de dos años y en el conjunto de los Estados miembros a 120.000 demandantes de asilo llegados inicialmente a Italia y Grecia.
Las condiciones del programa pactado, sin embargo, concretan el reparto por países de un primer cupo de 66.000 plazas y aplazan definir el resto del compromiso de acogida, es decir, 54.000 plazas, para más adelante, a la espera de que un tercer Estado miembro pida ser ayudado con este programa o se reasignen a inmigrantes llegados a Italia y Grecia.
El acuerdo salió adelante tras un primer intento fallido la semana pasada y pese al voto en contra de cuatro estados –Hungría, Rumanía, República Checa y Eslovaquia– y la abstención de Finlandia, según han informado fuentes diplomáticas.
República Checa
La República Checa, por su parte, ha anunciado que no impugnará ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (UE) las cuotas obligatorias de solicitantes de asilo. «No quiero aumentar la tensión con denuncias. La cuerda se puede tensar hasta un límite, y luego se rompe», ha reconocido en un comunicado el jefe del Gobierno checo, el socialdemócrata Bohuslav Sobotka.
«Nos esperan otras batallas y un camino realista para la crisis migratoria, y necesitamos que los socios en Europa escuchen nuestros argumentos», ha añadido.
Sobre las cuotas, Sobotka había indicado la víspera en otro comunicado que «la República Checa hará todo lo posible por evitar» aplicarla.
Rumanía
Por su lado, el presidente rumano, Klaus Iohannis, considera que su país puede gestionar el número de refugiados que le ha asignado la UE, pese a que sigue oponiéndose a las cuota obligatorias.
«El problema puede ser gestionado de manera fácil por parte de Rumanía; el número de refugiados no es grande y no hay que acogerlos en las próximas semanas, sino en un año lo más probable», ha declardo Iohannis antes de partir a Bruselas para participar en la cumbre extraordinaria de jefes de Estado y Gobierno sobre migración.
«Rumanía recibirá alrededor de 2.400 personas, a las que se añaden las que deberían venir por nuestra participación voluntaria (1.785 refugiados)», ha asegurado el jefe de Estado.
Sin embargo, Iohannis ha lamentado que «esta decisión se tomase mediante un voto mayoritario en vez de un consenso alcanzado por la negociación».