«Con la misma honestidad con la que planteó, creo que no es el momento de que esta moción sea debatida porque se ha retorcido y vendido como una victoria», ha argumentado Arantza Quiroga en la comparecencia que ha ofrecido para anunciar que retira la moción que registró ayer en el Parlamento para debatir la creación de una Ponencia de Libertad y Convivencia. Ha comparecido arropada por los dirigentes del PP en Gipuzkoa y Bizkaia, Borja Sémper y Antón Damborenea, y de la secretaria general del partido en la CAV, Nerea Llanos, pero sin ningún miembro del PP alavés.

Quiroga ha justificado la necesidad de salir a dar explicaciones porque se ha «retorcido y malinterpretado lo que había en el texto». En ese sentido, ha culpado de su marcha atrás al «uso partidista en términos de victoria» que a su juicio ha realizado EH Bildu de la iniciativa, que para la coalición constituía «un buen punto de partida para llegar a un consenso amplio» según indicó ayer. Según Quiroga, la coalición dijo que había conseguido «que el PP se moviera», una afirmación que el parlamentario Julen Arzuaga, encargado de valorar el contenido de la moción, no pronunció en su comparecencia.

Ha insistido en acusar a la coalición de «tergiversar y manipular el espíritu noble de esta moción», lo que a su juicio «evidencia la falta de altura de miras de quienes desde Bildu la han utilizado para si», y ha lamentado que «la buena voluntad del PP vasco se ve retorcida como una victoria de EH Bildu», algo que considera «injusto».

Niega presiones

Quiroga ha negado que su cambio de postura se deba a que haya recibido presiones internas desde las filas de su partido, a pesar de que el ministro español de Sanidad y presidente del PP alavés, Alfonso Alonso, se ha apresurado esta mañana a exigirle que rectifique inmediatamente al entender que «no se puede renunciar a exigir la condena expresa de ETA».

Al respecto ha asegurado que la apuesta por «deslegitimar el terrorismo» que se cita en la moción «es lo mismo que condenarlo».

La presidenta del PP de la CAV ha asegurado que desde su partido han escuchado y entendido todo su planteamiento y ha agradecido la sensibilidad con la que se ha recibido su iniciativa. Pero cree que lo ocurrido demuestra que «somos una sociedad que todavía no está preparada para todo esto, pero sé que un día llegará pero tiene que hacerlo de la manera correcta, en la que realmente estemos construyendo una convivencia en libertad».

«El espíritu de esta moción llegará de la manera correcta y tendrá su momento. No es este», ha reiterado.