El Gobierno de Nafarroa ha aprobado esta semana un anteproyecto de Presupuestos que fija un techo de gasto no financiero de 3.500 millones, 4% más que el presupuestos prorrogado, y del que el Ejecutivo destaca la garantía de los derechos sociales, la creación de empleo y la mejora de la calidad de los servicios.

La aprobación de estas cuentas supondrá supondrá poner fin a tres años de prórroga presupuestaria.

El portavoz parlamentario de UPN, Javier Esparza, ha declarado a los periodistas en los pasillos del Parlamento que, con la aprobación del anteproyecto, «se ha incumplido la ley».

«No quieren que veamos el presupuesto definitivo antes de las elecciones generales porque saben que les puede pasar factura», ha advertido, tras asegurar que «este Gobierno está distorsionando la realidad».

A su juicio, «se quieren tapar para que los navarros no sean conscientes de qué van a hacer con su dinero».

La portavoz del PSN, María Chivite, ha percibido en el anteproyecto un aumento del 4% en el techo de gasto «cuando la economía navarra ha crecido desde 2012 un 5%».

«En cuanto a servicios sociales, el aumento se corresponde a la aplicación de la nueva renta de inclusión social, aprobada la pasada legislatura a petición de PSN», ha señalado Chivite, quien ha subrayado que no ve «grandes avances, tal y como aseguraban».

La portavoz del PPN en el Parlamento, Ana Beltrán, ha destacado «la importancia del retraso» del anteproyecto. «Esto deja en evidencia las luchas internas entre el cuatripartito», ha indicado.

«No les llegan los recursos para poner en marcha todas las medidas que iban a desarrollar», ha asegurado Beltrán, que ha añadido que «son un brindis al sol».

«Terrible hipoteca»

Por su parte, el portavoz parlamentario de Geroa Bai, Koldo Martínez, se ha mostrado «globalmente de acuerdo con los presupuestos» que, ha subrayado, «parten de la terrible hipoteca en la que nos ha dejado el Gobierno de UPN en los últimos años».

Martínez ha destacado que «son muy ajustados pero intentan paliar los desperfectos provocados por los recortes».

También ha reiterado que «inciden en la mejora del gasto e inversión», tras asegurar que son «realistas y con un marcado carácter social». «Había que hacer limpieza general y tener un conocimiento profundo de la situación real de las cuentas», ha afirmado, tras reivindicar que «la política de verdad se hace con la reforma fiscal y los presupuestos». «Llegamos un poco más tarde, pero nada que ver con las prórrogas de los de UPN», ha explicado.

Enmiendas parciales

El representante del grupo parlamentario EH Bildu, Adolfo Araiz, ha realizado una «valoración muy positiva». «Se ha conseguido el objetivo fundamental, que es mantener el nivel de gasto de ejecución del 2015», ha asegurado Araiz, que se ha mostrado «completamente de acuerdo» con el anteproyecto de Presupuestos.

Sin embargo, ha reconocido que «se tratará de modificar algunas partidas que todavía son objeto de discusión entre las cuatro fuerzas políticas». «No plantearemos enmiendas a la totalidad, pero sí que puede haber enmiendas parciales si quedaran pendientes algunos flecos que nos parecen importantes», ha garantizado.

El segundo portavoz parlamentario de Podemos, Carlos Couso, ha justificado «la dilación en la presentación» de los Presupuestos, que se ha debido, ha explicado, «a que, para saber cómo gastar el dinero de la Hacienda Pública, hay que saber con cuánto se puede contar».

«También estábamos condicionados por la reforma fiscal que todavía está en proceso, y no se sabía el marco legal de recaudación que íbamos a tener», ha apuntado.

A Podemos, ha dicho Couso, no le «preocupa que se alargue un poco más, lo que importa es que las cosas se hagan bien y con clama, que no sean producto de la frivolidad, la aceleración y las prisas». «El anteproyecto no va a ser completamente del gusto de ninguna de las cuatro fuerzas», ha asegurado, y «posiblemente haya enmiendas parciales».

El portavoz de Izquierda-Ezkerra, José Miguel Nuin, ha reivindicado que el Gobierno se ha encontrado con «situaciones complicadas como consecuencia de decisiones que otros han tomado, y marcos legales que otros han aprobado». «Los presupuestos se han visto afectados por la legislación normativa estatal en materia de estabilidad presupuestaria, que va a suponer 70 millones de euros menos de ingresos», ha señalado.

También cree que otro inconveniente es que, «en noviembre del año pasado, UPN, PSN y PPN aprobaran una reforma fiscal que en 2016 supondrá 75 millones de euros menos de ingresos». «Así ya sumamos cerca de 150 millones de ingresos menos de recursos para el próximo año», ha lamentado.