El PP quiere dejar sin la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) a quienes no hayan aprendido euskara o castellano en cinco años. «Una persona que lleva tres años aquí y que no sabe ninguna de las dos lenguas oficiales está demostrando poco interés por integrarse; y si después de dos años más sigue sin aprender, es evidente que no hay una voluntad de integración. [...] Y habrá que pensar en decirle que se ha acabado el tiempo en que le íbamos a garantizar los ingresos fijos, porque si no le damos el mensaje de que va a tener garantizados de por vida esos ingresos», ha remarcado el vicesecretario general del PP de la CAV, Javier de Andrés, que ha afirmado que esta medida tiene por objeto evitar la «cronificación» de los perceptores.

En una rueda de prensa, De Andrés ha defendido el principio de «reversibilidad» para acabar con la supuesta «cronificación», de la que no ha aportado datos concretos. «Hay una serie de datos que podemos deducir, pero no serían exactos», ha destacado tras señalar que la citada «reversibilidad» también debería aplicarse a los perceptores que no realicen trabajos sociales. «Queremos que las personas que cobran la RGI contribuyan», ha señalado el político derechista, que ha insistido en que el modelo de ayudas vigente «ha fracasado».

En este sentido, ha defendido la Iniciativa Legislativo Popular impulsada por la plataforma Ayudas+Justas, que quería dejar sin la RGI a las personas en situación irregular y aumentar a cinco años el requisito de empadronamiento. Esta iniciativa, rechazada por el Parlamento autonómico, fue apoyada y defendida por el vicesecretario sectorial del PP, Javier Maroto, que en 2014 acusó a los magrebíes de venir a Gasteiz «a vivir de las ayudas sociales». El PP vuelve a activar el debate sobre la RGI a falta de unos meses para los comicios autonómicos.