A la espera de la habitual guerra de cifras, un simple vistazo a la plaza Catalunya de Barcelona esta mañana ha bastado para comprobar que el soberanismo organizado moviliza a mucha más gente que la «mayoría silenciosa» unionista. Miles de personas han llenado rebosar la misma plaza céntrica en la que pinchó hace una semana la plataforma Societat Civil Catalana. Lo han hecho al grito de «¡Unidad!», convocadas por la Assemblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultural, que esta mañana se han comprometido con la consulta alternativa del 9 de noviembre, al tiempo que han exigido la convocatoria de elecciones plebiscitarias.

Así lo ha explicitado en su discurso la presidenta de la ANC, Carme Forcadell, que ha asegurado que convertirán el 9 de noviembre en una nueva demostración de fuerza «siempre que sea considerada la primera vuelta de unas elecciones plebiscitarias y refrendarias que sirvan para decidir el futuro de Catalunya». «President, convoque elecciones, queremos votar en los próximos tres meses. Si lo hace, tendrá nuestro apoyo y convertiremos el 9 de noviembre en una movilizacón masiva», ha señalado Forcadell, apelando directamente al president, Artur Mas.

La presidenta de la Assemblea, sin embargo, ha tenido palabras para todas las fuerzas políticas: «Desde la unidad de la sociedad civil nos sentimos legitimados para pedir la unidad política para tirar adelante este proceso. Os exigimos que pongáis el país por delante de vuestros intereses de partido». «Nada impedirá la independencia de Catalunya si así lo queremos la mayoría de ciudadanos y ciudadanas de Catalunya», ha concluido.

En la misma línea se ha pronunciado la presidenta de Òmnium, Muriel Casals, que ha recordado que los partidos han estado, hasta el momento, «a la altura de la circunstancias», pero que en las últimas horas «confusas» se ha caído en cierto «desánimo». «Os pedimos que os volváis a sentar en la misma mesa. El país se lo merece y vosotros también», ha añadido.

Casals ha señalado también que «el 9 de noviembre expresaremos al mundo nuestra determinación absoluta a decidir nuestro futuro y desafiaremos al Estado Impropio». La presidenta de Òmnium ha finalizado rechazando diferentes planes: «Queremos un único plan nítido basado en tres puntos: unidad de todos los partidos para el 9 de noviembre, urnas para decidir nuestro futuro e independencia si una mayoría de los ciudadanos así lo expresamos en las urnas».

Los discursos de las dos caras visibles de la sociedad civil han concluido un acto de una media hora que ha arrancado con la lectura de la introducción de la Declaración de Soberanía aprobada en 2013 por el Parlament, lectura que ha corrido a cargo del presidente de Súmate, Eduardo Reyes y otros activistas de la sociedad civil. Tras ellos, Lluís Llach, Cesk Freixas y Sílvia Bel han puesto la nota poética con la interpretación musicada del poema ‘Ara mateix’ -Ahora mismo-.

El acto ha contado con una nutrida fila 0 en la que han coincidido representantes de los partidos soberanistas, cuyas divergencias respecto a las elecciones plebiscitarias marcan el contexto político catalán de estos días. Entre otros, se han dado cita Jordi Turull y Josep Rull (CDC), Marta Rovira (ERC), Marc Sallas (CUP), Joan Josep Nuet (ICV-EUiA), Marina Geli y Jordi Martí (PSC), el conseller de Cultura, Ferran Mascarell, y la pareja del president, Artur Mas, Helena Rakosnik.