La máxima instancia judicial de recurso ha concluido que ese juzgado de Gante no cometió «ningún error de Derecho», como había alegado la Fiscalía española, que recurrió la decisión de no extraditar a la refugiada política vasca Jaione Jauregi. La decisión del Tribunal de Casación valida por tanto la decisión del tribunal de Gante.

La justicia española emitió en agosto de 2015 la nueva orden europea de arresto. Jauregi ya había sido detenida en Bélgica en octubre de 2013, cuando pesaban sobre ella otras dos órdenes europeas de detención.

Sin embargo, el Tribunal de Casación permitió entonces su liberación al dar la razón a un juzgado de Apelaciones de Gante, que rechazó su extradición al entender que podía ser víctima de una violación de los derechos humanos en el Estado español.

Jaione Jauregi estaba refugiada desde 1979. El abogado de Jauregi argumentó tras su detención que se había superado el plazo razonable que exige la normativa para la entrega, al haber transcurrido 32 años de los hechos por los que le reclamaba la Audiencia Nacional española.

En esta ocasión, dos instancias judiciales de Bélgica, la Cámara del Consejo de Gante y la Sala de Acusaciones de Gante, se habían negado ya a ejecutar la nueva orden de arresto contra Jauregi, de 58 años, pero la Fiscalía general decidió elevar el caso al Tribunal de Casación.