En una entrevista a Euskadi Irratia, recogida por Europa Press, Tapia ha señalado que, nada más concluir la reunión que mantuvo con el ministro español de Fomento, Iñigo de la Serna, y los alcaldes de Bilbo, Gasteiz y Donostia, redactó una carta solicitando una nueva reunión al ministro, porque «ya hemos tenido bastantes retrasos y es el momento de definir de una vez el proyecto».
Así, ha asegurado que han solicitado a De la Serna «sentarnos cuanto antes» y definir proyectos como la entrada del TAV a las capitales, «porque una cosa es que haya acuerdo en las palabras y otra pasar de las palabras a los hechos». «Ha llegado el momento para eso y veremos de verdad si existe disposición o no, y si hay voluntad de ir más allá de las palabras y conseguimos definir esos proyectos este año», ha indicado.
En este sentido, ha destacado que el Gobierno de Lakua quiere celebrar la segunda reunión con el ministro «cuanto antes», y ha advertido de que, «si se alargan los plazos y nos lleva meses hacer esa reunión, eso también significará algo». «Palabras sí –ha añadido–, pero ahora toca saber de verdad cuando se van a poner en marcha esos proyectos, y eso demostrará si el Estado tiene verdadera voluntad para que la ‘Y vasca’ sea una realidad o no».
Asimismo, ha afirmado que, si el Ejecutivo de Lakua asumiera la responsabilidad de algunas de las obras del TAV en el tramo guipuzcoano, «los plazos se cumplirían con más facilidad», y que ya trasladaron esa posibilidad a De la Serna en la reunión que mantuvieron, aunque el ministro no la contempló, por lo que no se ha mostrado muy optimista al respecto.
Así, la consejera de Desarrollo Económico y Infraestructuras ha explicado que, teniendo en cuenta que en el denominado ‘Nudo de Bergara’ hay «un tramo muy complicado», a día de hoy se baraja un plazo de «40 o 42 meses» para la finalización de ese tramo de la obra.
«Si las entradas a las capitales se hicieran al mismo tiempo, estaríamos hablando de lo que es la obra civil, ya que luego habría que poner encima las vías, la electrificación, la automatización y, posteriormente, los trenes y hacer pruebas. Por lo tanto, si la obra civil necesita 40-42 meses y el resto otros dos años, los plazos están ahí. 2020 sería siendo tremendamente optimistas, y creo que no se va a cumplir. Yo creo que será a partir de 2023, y me gustaría no acertar y que fuera antes», ha reiterado.
Además, ha considerado que la conexión de la 'Y vasca' con el Estado francés, «aunque no sea a tan alta velocidad», llegará antes que la conexión con el resto del Estado español, y que se producirá «sobre 2019 o 2020».