El encargado de realizar este anuncio ha sido el presidente de Vox, Santiago Abascal, en una rueda de prensa que ha ofrecido en el Congreso junto con otros líderes del partido después de que se formalizara la presentación de esta querella.
En concreto, Vox acusa a Zapatero de «colaboración con banda terrorista, revelación de secretos y omisión del deber de perseguir los delitos», por supuestamente haber alertado de detenciones de militantes de ETA en el Estado francés durante la negociación que su Gobierno mantuvo con la organización armada.
Abascal ha dedicado a Zapatero, entre otros títulos, el de «embajador» del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro; y «abogado defensor» de Arnaldo Otegi y Oriol Junqueras.
Vox denuncia además en su querella que Zapatero «era conocedor de que la banda terrorista ETA estaba fabricando explosivos tres meses antes del atentado de la Terminal-4 de Barajas y a pesar de ello mantuvo la negociación con la banda terrorista», a la que presuntamente «facilitó información obtenida por los medios de colaboración policiales de las actuaciones que tenía previstas la policía francesa, pudiendo con ello los terroristas evitar su acción».
Petición a Suiza
Vox también atribuye al expresidente español habre influenciado al Ejecutivo francés para «bajar la presión» policial sobre ETA y haber ofrecido a la esta organización «anexionar Navarra al País Vasco», legalizar Batasuna, no detener a sus militantes, liberar a Iñaki de Juana, derogar la Doctrina Parot o «solucionar su financiación a través de una organización internacional para que dejaran de enviar cartas de extorsión».
Además, el partido de Abascal pide una comisión rogatoria dirigida a las autoridades suizas «a fin de recabar de la Fundación Henry Dunant la totalidad de las actas de negociación entre la banda terrorista ETA y el Reino de España».