Se acabaron las especulaciones disparadas por la consulta a los consejeros del pasado martes. Iñigo Urkullu ha confirmado que disuelve el Parlamento de Gasteiz y convoca elecciones para el 5 de abril. Se trata del domingo justamente anterior a Semana Santa.

Ello supone un adelanto de casi medio año respecto al fin de legislatura ordinario. Los comicios anteriores se celebraron el 25 de setiembre de 2016. Técnicamente podía estirarse este ciclo hasta octubre, seis meses más.

La decisión ha sido tomada en plena polémica por la gestión de la tragedia del desprendimiento de Zaldibar y apenas once días después de la huelga general que sacó a la calle a decenas de miles de personas en Euskal Herria.

Rodeado de su gobierno, Urkullu ha justificado el adelanto en tres razones: percibe que en la CAV ya se «ha instalado un ambiente electoral», considera que «es bueno para la sociedad vasca» y «permite ganar medio año» para la elaboración de los presupuestos de 2021.

Zaldibar, «catástrofe natural» y «empresa privada»

Preguntado por su ausencia en Zaldibar estos días, Iñigo Urkullu ha argumentado que ha estado permanentemente informado del asunto, pero que era una cuestión de los técnicos y «no se trata de estar allí por estar».

En la primera parte de su respuesta ha hablado de «catástrofe natural» y luego de «suceso fatal», para acabar añadiendo en tercer lugar la definición de «accidente laboral». Sobre esto último, ha indicado que el lehendakari no acude a los puntos en que se producen siniestros de este tipo y ha añadido como razón para no asistir que el vertedero lo gestiona «una empresa privada».

Antes de todo ello, Urkullu ha menospreciado como «campañas de Twitter» las críticas por falta de empatía con esta tragedia.

Calendario acelerado

El calendario se acelera desde ya. Los partidos deben presentar sus candidaturas entre el 26 de febrero y el 2 de marzo. Y un par de ellos, Elkarrekin Podemos y PP, no tienen aún candidato a lehendakari designado. En el primer grupo aspiran al cargo Miren Gorrotxategi y Rosa Martínez. En el partido derechista se apuesta por Alfonso Alonso, aunque aún no tiene aval expreso de la dirección estatal.

El decreto de disolución del Parlamento se publicará este martes en el Boletín Oficial del País Vasco (BOPV) y a partir de ese momento comienzan a correr los plazos.

La normativa señala que los partidos deben presentar ante las distintas juntas electorales sus listas en el plazo comprendido entre 15 y 20 días desde la publicación del citado decreto, en este caso, entre el 26 de febrero y el 2 de marzo.

Una vez concluida la presentación de candidaturas se publicarán las listas en el BOPV para que se puedan presentar impugnaciones y se subsanen errores, y el 9 de marzo se hará la proclamación oficial de candidatos.

La campaña electoral comenzará el 20 de marzo, viernes, aunque los partidos adelantarán unas horas sus actos de apertura y los harán durante la noche del jueves, 19 de marzo, día festivo en la CAV.

El sábado 4 de abril será la jornada de reflexión y al día siguiente se celebrarán las duodécimas elecciones al Parlamento de Gasteiz.

Con las gallegas, por cuarta vez

Nada más escuchar el anuncio de Urkullu, el presidente gallego, Alberto Núñez-Feijóo, ha reunido a su gobierno y ha comunicado también anticipo electoral para el mismo 5 de abril.

Con ello será la cuarta ocasión consecutiva en que las urnas en la CAV se solapan con las gallegas. Ocurrió ya en 2016, 2012 y 2009.