Ser corresponsal de guerra es un periodismo que está de moda, a pesar, eso sí, de que la mayoría de las crónicas obedecen a una sola voz, la de EEUU, Israel, la UE y la OTAN. Así que voy a ser irreverente y recordar a John Reed, periodista, comunista y un referente del buen periodismo. Reed murió un 19 de octubre de 1920 en Moscú a los 32 años, después de haber fundado el Partido Comunista Norteamericano y haber escrito el que Lenin consideró el mejor libro sobre la Revolución de Octubre (“Diez días que estremecieron al mundo”, 1919). En octubre de 2020, México le rindió un homenaje por su valiente trabajo como reportero en la Revolución mejicana. Sus crónicas se publicaron en la prensa neoyorkina y en 1914 Reed las publicó en el libro “México Insurgente”. En el acto, el escritor P. Ignacio Taibo II recordó que Reed escribió “tomando posición contra toda invasión militar de EEUU”. “Sabía que tenía que hacerlo”, reconoció el propio Reed en sus memorias. El 1 de noviembre también de 2020, nuestro compañero Koldo Landaluce retomaba esa idea en un magnífico reportaje sobre John Reed, publicado en Naiz y que, en octubre, mes de aniversarios de revoluciones y revolucionarios, debería ser lectura obligada para conocer a uno de los periodistas más influyentes e importantes del siglo XX.