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Investigadores de la UPNA transforman residuos peligrosos para usos medioambientales

El grupo de investigación ‘Tecnologías y aplicaciones medioambientales’ (TAMA) de la Universidad Pública de Nafarroa ha transformado residuos peligrosos generados en el reciclado del aluminio en materiales con aplicaciones en procesos medioambientales.

Integrantes del grupo TAMA de la UPNA. (UPNA)
Integrantes del grupo TAMA de la UPNA. (UPNA)

El catedrático Antonio Gil Bravo ha señalado que sus investigaciones se han centrado en contribuir a eliminar contaminantes emergentes y tratar gases emitidos a la atmósfera que contribuyen de manera importante al efecto invernadero.

El material empleo son las escorias salinas de aluminio que se generan en el proceso de fundición de este metal y están catalogadas como residuos peligrosos porque, por ejemplo, al mojarse con agua de lluvia, pueden generar la emisión a la atmósfera de gases como amoniaco o hidrógeno, indica Gil Bravo.

El grupo liderado por este catedrático inició esta investigación tras la petición de una empresa de reciclaje de aluminio que les planteó el reto de valorizar ese tipo de residuos que, en general, se gestionan mediante vertido controlado, un modelo de gestión que tiene fecha de caducidad en Europa y para el que ya se están buscando alternativas.

En la solución propuesta, los investigadores han desarrollado materiales que pueden ser aplicados como adsorbentes y fotocatalizadores para eliminar contaminantes emergentes (ibuprofeno, diclofenaco, entre otros).

Los materiales utilizados como adsorbentes permiten separar los contaminantes orgánicos del agua a partir de las interacciones químicas y físicas de las moléculas y su superficie, mientras que en el caso de la acción fotocatalítica se necesita que en su formulación existan centros activos, como el óxido de titanio, que permitan por la acción de la luz ultravioleta y visible degradar los contaminantes orgánicos.

TAMA ha desarrollado también catalizadores para el reformado seco (tecnología de producción de gas de síntesis) de CH4 y en la valorización y almacenamiento de CO2, dos gases implicados en el efecto invernadero.

En este caso, han sintetizado materiales estables a las altas temperaturas que requieren estos procesos catalíticos y adicionalmente una fase metálica que intervenga en la reacción química.

Gil Bravo destaca que estas soluciones «se enmarcan en la denominada estrategia de economía circular, en el sentido de que tratamos un residuo sin valor económico y le proporcionamos valor al generar otros materiales con un potencial para resolver problemas medioambientales».

Fruto de este trabajo se han presentado 4 patentes de invención, publicado numerosos artículos científicos en revistas de alto impacto, impartido conferencias invitadas en congresos especializados en materia de residuos, se están desarrollando 4 tesis doctorales y se han fortalecido las relaciones con otros grupos de investigación nacionales e internacionales.