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Retiran un lote galletas del mercado por presencia de burundanga y atropina

Las autoridades sanitarias españolas han retirado del mercado un lote de galletas con pepitas de chocolate de la marca Gerblé al detectar que contenían escopolamina, más conocida como burundanga, y trazas del medicamento atropina. Este lote también ha sido distribuido en el Estado francés y Andorra.

Imagen del lote de galletas contaminado con burundanga y atropina.
Imagen del lote de galletas contaminado con burundanga y atropina. (AEMPS | Europa Press)

Las autoridades sanitarias han retirado del mercado un lote de galletas de chocolate sin gluten de la marca Gerblé que se habían repartido por todo el Estado español, al detectar en el mismo la presencia de escopolamina (conocida como droga del burundanga) y trazas del medicamento atropina. Las autoridades han recomendado a los consumidores que comprueben si tienen algún producto de ese lote en casa. Las galletas también fueron distribuidas en Andorra y el Estado francés, país este último del que procede el lote afectado.

Según AESAN, Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, el lote se ha distribuido en todas las comunidades. Se trata del lote 51914913 de las galletas Gerblé de pepitas de chocolate sin gluten, en envase de cartón de 150 gramos y vendidas a temperatura ambiente, que caduca el 20/09/2023.

La presencia de droga y medicamento en el producto se detectó por primera vez en Catalunya, que avisó de la contaminación al Sistema Coordinado de Intercambio Rápido de Información. 

Sanidad está verificando la retirada del mercado de este lote y ha recomendado a las consumidores que comprueben si tienen este producto en casa para no consumirlo.

Por su parte, la Red Europea de Alerta Alimentaria (Rasff, por sus siglas en inglés) señala que la primera notificación la hizo el Estado español el pasado 30 de junio y por el momento no hay personas afectadas por su consumo.

Tras el aviso de las autoridades españolas, se comprobó que el lote tenía origen francés y se distribuyó tanto en el país galo como en Andorra, mientras que Alemania está haciendo un seguimiento de la alerta.

La red europea ha ubicado esta alerta de seguridad alimentaria dentro de la de riesgos serios y especifica, por otro lado, que la propia empresa alimentaria notificó, fruto de sus autocontroles, el problema de contaminación.