MIKEL INSAUSTI
CINE

«The Lost King»

Como tantos otros directores británicos Stephen Frears empezó en la televisión, para convertirse en el máximo impulsor del movimiento de cine social que se dió en los años 80, aunque su consagración internacional le llegaría con una película de época, la oscarizada adaptación del clásico de Pierre Choderlos De Laclos “Las amistades peligrosas” (1988). Un éxito que le llevó a Hollywood, donde nunca le fue tan bien como en su propio entorno, y así volvió a recuperar terreno en su etapa irlandesa con “Café irlandés” (1993) y “The Van” (1996). Con el nuevo milenio entró en una fase de madurez en la que hizo películas más tranquilas con grandes y veteranas damas de la interpretación, que le pusieron otra vez en la senda de los Óscar, gracias a la Helen Mirren de “The Queen” (2006) o a la Judi Dench de “Philomena” (2013). Entre tanto, nunca ha dejado de hacer televisión, medio para el que ha creado “State of the Union” (2019) y su continuación “State of the Union 2” (2022), además de la nueva miniserie “The Palace” (2023), protagonizada por Kate Winslet. Pero que nadie se preocupe, porque aunque el próximo mes de junio cumplirá los 82, sigue rodando películas tan instructivas y emocionantes como “The Lost King” (2022).

Su última original propuesta se estrenará el 5 de mayo en nuestras salas, y es otra película para todos los públicos como las que viene realizando de un tiempo a esta parte, incluso se podría decir que es de interés general. Se basa en el libro autobiográfico de Philippa Langley “The Search for Richard III”, y nos descubre el gran potencial de esta mujer, en cuanto representante de las personas corrientes que consiguen grandes logros para envidida de la inteligencia oficial, ya que en la Academia de Historia la ven como una intrusa. Una historiadora aficionada que, sin embargo, hizo el mayor descubrimiento de la historia británica, y al que no se le ha dado su verdadera importancia, precisamente por venir de alguien sin preparación académica. La película quiere ser un homenaje y un reconocimiento a su trabajo de investigación, capaz de acallar las voces más escépticas.

Frears ha elegido a Sally Hawkins, por ser la actriz británica más empática, y con la que el público más se identifica, a pesar de que no se parece fisicamente en nada a la verdadera Philippa Langley, para así preservar su relativo anonimato. Representa a las mil maravillas a esta divorciada de Edimburgo, madre de dos hijos, y que en su tiempo libre se dedica a estudios históricos, yéndose a especializar en Ricardo III, de la que es la mayor experta.

“The Lost King” (2022) defiende asimismo que la mayoría de los descubrimientos de la humanidad han respondido a intuiciones, y no a certezas. Cuando Philippa Langley hizo pública su corazonada de que los restos desaparecidos del rey fallecido más de cinco siglos atrás se encontraban debajo del suelo de un parking de Leicester, la tomaron por loca. Pero, en efecto, allí estaban, justo donde ella dijo.

A la hora de anunciar semejante hallazgo, no se le permitió subir al estrado, porque la gloria se la tenían que llevar profesores y académicos del sexo opuesto. La mayoría no daban crédito, y tuvieron que ser las pruebas científicas de ADN las que confirmarán la autenticidad de la exhumación.

Afortunadamente, ella no estuvo sola, y tuvo siempre el apoyo incondicional de su familia, todo lo imperfecta que se quiera, pero con un exmarido que mantuvo la complicidad del cuarteto completado por los dos hijos. Un papel que recae en Steve Coogan, que ha sido igualmente responsable de la producción. De él partió el proyecto, siendo el primero en entrevistarse con la autora. Lo que más le admiraba de Philippa Langley era que, pese a todos los obstáculos que se le presentaron, fue capaz de dar con una verdad que acabó por cambiar la creencia de toda Gran Bretaña en torno a la leyenda negra de Ricardo III, alimentada por la obra teatral de William Shakespeare, quien lo presentaba como un sangriento usurpador ilegítimo de terrible aspecto deforme.