Pelegrín, un conocido de Bordalás refuerza la zaga
El central catalán jugó la anterior temporada ocho encuentros como titular en Primera con el Elche.
Como suele ser habitual, los técnicos, especialmente si llegan a un nuevo banquillo, suelen rodearse de futbolistas de confianza en el vestuario. José Bordalás no iba a ser una excepción y ya ha comenzado a confeccionar una plantilla a su gusto. La incorporación del central Sergio Pelegrín, con el que coincidió anteriormente en el Alicante y el Elche, va en esa onda.
El defensa catalán, que en abril pasado cumplió 36 primaveras, se ha comprometido con el Alavés únicamente para la próxima temporada. De este modo, el staff técnico babazorro vuelve a confiar en la veteranía para consolidar la zaga, tras la marcha de futbolistas talluditos como Jarosik o Migue.
Pelegrín jugó la campaña pasada en Primera, defendiendo la camiseta del Elche, descendido de momento de manera administrativa. Disputó un total de 726 minutos, repartidos en diez encuentros ligueros, ocho de los cuales partió con la condición de titular. Lombán y Roco fueron los más utilizados por Escribá para el eje defensivo ilicitano, mientras que Pelegrín fue entrando en los onces, en función de las necesidades.
El central barcelonés es un auténtico trotamundos del fútbol, en el que ha conocido casi todos los niveles. Se crió en la cantera culé, fue internacional en categorías inferiores, acabó pasando al otro lado, al enrolarse en las filas del Espanyol, y posteriormente hizo lo propio con el Mallorca, en sus respectivos filiales. Al no cuajar, probó suerte en los también promesas del Zaragoza para terminar en 2003 fichando por el Girona.
De ahí pasó al Alicante, donde jugó tres campañas hasta que en el verano de 2007 pasó a incorporarse a la disciplina del Salamanca. Dos ejercicios más tarde, se hico oficial su fichaje por el Rayo Vallecano, en el que solo permanecería un año para hacer las maletas rumbo a Elche, donde ha jugado hasta ser ahora tentado por el nuevo proyecto del Alavés bajo la dirección de José Bordalás.